'Los reyes del mambo cantan canciones de trap' o cómo un estudiante de Filosofía que quería ser estrella del trap ha acabado cambiado se la industria musical de un país entero. "Era un crío, iba en Clio. Ahora miro al horizonte y todo esto es mío".
Fantasía y fuegos artificiales
Esto de ayer de C. Tangana en el Palau Sant Jordi fueron fuegos artificiales. Pucho había de venir a Barcelona a presentar su último disco, El madrileño, y acabó protagonizando uno de los mejores directo que se han visto en Barcelona en muuuuuucho tiempo. Un espectáculo total con una idea y concepto perfectamente desarrollado y materializado, que lo sitúa en las grandes ligas de la élite mundial. ¿Exagerado? No. Ahora mismo, si queréis vivir dos horas y media de fantasía, sólo tenéis que pillar entradas para el próximo concierto de Antón.
Fue justo hace un año, C. Tangana protagonizó uno de los mejores Tiny Desk que se recuerdan. Pucho montó un aunténtico sarao en la casa Carvajal de Madrid. Una sobremesa flamenca en que lo acompañaban amigos, socios, aliados, referentes e iconos como Alizzz, La Hungara, Niño de Elche, Antonio Carmoma, Kiko Veneno... El concierto de ayer partía de esta misma visión pero elevada a su máxima potencia, ahora transformando el Sant Jordi en uno de aquellos clubs de la Nueva York de los años 40 en qué los protagonistas de las novelas d'Óscar Hijuelos intentan hacerse un lugar como músicos de jazz latino: un barman, una orquesta, mesas repartidas por el ancho del escenario para hacer sentar a los amigos...
Tangana y amigos
Sobrado de talento, sobrado de ambicion, sobrado de canciones, sobrado de cómplices... la noche empezó con 'El milagro' y acabó con una versión olímpica del 'Suavemente' de Elvis Crespo. Entre medio dos horas y dos cuartos de pirotecnia musical y escenográfica. Uno a uno, C. Tangana fue decodificando todos los incunables de su repertorio pretéritos y actuales (además de una larga lista de versiones que trazan el mapa sonoro del madrileño en la actualidad), del trap a esta relectura contemporanea del pop español y la música latina, del 'Yelo' al 'Ateo', del 'Llorando en la limo' al 'Comerte entera'.
Y uno en uno, más allá de La Húngara y Niño de Elche, artistas de un nivel superior que Pucho ha sumado a su banda habitual, fueron desfilando por el tablao del Sant Jordi invitados de lujo como Rita Payés, Jorge Drexler, Kiko Veneno... Echamos de menos la Nathy Peluso y el Alizzz, su gran aliado de Castelldefels (y, en buena parte, responsable de su éxito). En cambio, y protagonizando el gran momento de la velada, pudimos disfrutar de la aparición de los hermanos José y David Muñoz. "Hice gran parte del disco pensando en Estopa", confesaba Tangana, para, todos juntos, pasar a dar vida a una versión de 'Tucalorro' que fue, de forma incuestionable, el momentazo de la noche. "Dios bendia el reguetón, diós bendiga a Daddy".