Shinichi Kudo, el joven detective envenenado que se convirtió en un niño de 8 años, vuelve a las grandes pantallas en la que es, ya la 22 película de la serie iniciada en 1996. Zero the Enforcer (Detective Conan: El caso cero) es la película más vista en Japón en las últimas semanas y se estrenará en nuestros cines el próximo viernes. Los fans del detective están esperándola con emoción. Y no son pocos: dicen que los manga de Conan, el personaje creado por Gosho Aoyama, ya llevan 200 millones de copias vendidas. Y los seguidores no sólo son niños y jóvenes. Muchos adultos son auténticos devotos del personaje. En realidad, Zero the Enforcer es una película con un guion lo bastante complejo, quizás más destinada a un público adulto que infantil. Ha sido dirigida por Yuzuru Tachikawa, que con esta obra se inicia en el mundo del largometraje.
Más allá del asesinato
Si bien la mayoría de los casos del detective Conan se basan en complejos asesinados, en este caso la trama se complica, porque se inicia con un atentado terrorista que destruye un edificio recién construido en una isla artificial que tiene que alojar un acontecimiento internacional. Nadie sabe si se trata de un accidente o una acción terrorista, pero muy pronto empieza a haber un sospechoso claro, que es la persona menos esperada. Conan se verá arrastrado a esta investigación, de gran complejidad, y con él acabará involucrándose su equipo de colaboradores habituales. Una trama que va mucho más allá de los crímenes casi perfectos que suele ofrecer el Conan televisivo y que rompe incluso con la dinámica habitual de la trama de la serie.
Cuando Sherlock se convierte en James
El Detective Conan es, tal como su nombre indica, un personaje inspirado en Sherlock Holmes. Su principal herramienta de trabajo es su afiladura inteligencia y, sobre todo, su capacidad de deducción. En esta película, no obstante, estos dotes de Conan se combinan con otras habilidades más propias de otros héroes, como James Bond. Este filme incluye carreras en coche, persecuciones, enfrentamientos directos con delincuentes... De esta forma se consigue que el ritmo de la película se vaya incrementando a medida que se acerca el final. De esta forma el personaje gana ritmo y atractivo.
Las cloacas del Estado
La mayoría de episodios televisivos de Conan enfrentan al pequeño detective con individuos resentidos que cometen algún crimen por venganza, o como mucho a organizaciones mafiosas especializadas en la delincuencia. En esta película, Conan irá mucho más lejos, ya que se encontrará involucrado en un caso que implica las cloacas del Estado. Si generalmente en el manga la ley y el orden tienen referentes muy claros, aquí la situación es mucho más ambigua, y hasta el final de la película se mantiene la intriga sobre quién controla a los que nos controlan. En este episodio la policía no será la aliada de Conan Edogawa, sino una fuerza desbocada fuera de control que actúa bajo intereses oscuros. Y un papel más turbio, todavía, juega la Fiscalía.
Apuesta segura
El éxito de esta película en Japón, donde ya la han visto seis millones de espectadores, hace pronosticar aquí una buena recepción del nuevo filme de Conan Edogawa. La película incluso incluye una pequeña entrada donde se explican los personajes, a fin de que puedan verla personas que no conocen la serie televisiva ni sus personajes. Pero, en el fondo, Detective Conan: Zero the Enforcer parece destinada prioritariamente a los fieles seguidores del detective. Y estos, a buen seguro, que quedarán encantados con un filme en que combina las esencias del personaje, con los recursos necesarios para convertirlo en un personaje de largometraje.