Parecería imposible estar nominado con dos películas diferentes y en premios distintos, pero a Eduard Fernández no hay nada que se le resista. Después de ganar el Gaudí por El 47, el actor catalán se ha llevado el cabezón a mejor actor en los Premios Goya por Marco, otra de las cintas de la temporada, en que interpreta a Enric Marco, impostor que se hizo pasar por superviviente de un campo de concentración nazi sin haberlo sido. Con esta estatuilla, Fernández suma ya cuatro galardones en la historia de los premios, consiguiendo su cuarta estatuilla en la gran fiesta del cine español y entrando en el ránking de actores más premiados en esta categoría —y más nominado, con 14 veces a sus espaldas—. Para superar la meta, ha pasado por delante de Alberto San Juan (Casa en flames), Alfredo Castro (Polvo serán), Urko Olazabal (Soy Nevenka) y Vito Sanz (Volveréis).
La gran ganadora de la noche ha sido El 47, que se ha llevado 5 galardones, entre ellos la de mejor película ex aequo con La infiltrada, algo inédito que nunca había ocurrido en la historia de los galardones españoles. Segundo premio y La habitación de al lado han empatado con tres estatuillas, al igual que La virgen roja, La estrella azul y Marco, con dos premios cada una. Sin embargo, el cine catalán ha sido seguramente el gran vencedor de una noche llena de ovaciones y emoción que ha ratificado las ideas de nuestra casa como uno de los grandes motores de la industria.
Eduard Fernández gana el Goya 2025 a mejor actor
Eduard Fernández es uno de los actores más prolíficos de su generación, con una cuarentena de filmes a sus espaldas y una dilatada carrera tanto en teatro como en televisión. Además, ha trabajado con grandes directores del cine español, como Fernando Trueba, Bigas Luna, Mar Coll, Vicente Aranda, Cesc Gay, Agustí Villaronga, Álex de la Iglesia, Belén Funes, Alejandro Amenábar o Pedro Almodóvar. Su palmarés es uno de los más extensos del sector cinematográfico de nuestra casa, con representación en certámenes internacionales tan relevantes como el Festival de San Sebastián —Concha de Plata al mejor actor por su papel en El hombre de las mil caras—.
La estatuilla que Fernández ha sumado por Marco es el cuarto Goya que recoge en su trayectoria. Ha estado nominado hasta en 14 ocasiones a los premios de la Academia española, llevándose el galardón por las películas Fausto 5.0, En la ciudad y Mientras dure la guerra, aparte del recién estrenado. Fernández también conquistó su quinto Gaudí hace un par de semanas, en esta ocasión por El 47, la película más nominada de los Premios Goya en la, casualmente, no ha recibido nominación. También ha ganado cuatro Fotogramas de Plata, dos premios de la Unión de Actores, un premio Feroz (y 8 nominaciones) y tres Biznagas de Plata como mejor actor.
La película dirigida por Aitor Arregi Galdos y Jon Garaño explica la historia de un hombre que se hizo pasar por superviviente del nazismo hasta que fue descubierto, basando toda su vida en una mentira. Enric Marco fue presidente de la Asociación AMICAL de Mathausen y siempre justificó su gran mentira. Hasta que se destapó el gran escándalo: el informe del historiador Benito Bermejo descubrió que nunca fue enviado a Alemania por la dictadura cómplice de Hitler, sino que había viajado como voluntario para ser mano de obra en fábricas de arsenal militar. Un engaño que implicaba, como confesó finalmente, que tampoco había estado preso en el campo de Flossenbürg.