Ya hace años que el nombre de Santa Salut resuena, no sólo en el circuito del rap underground, sino en grandes festivales o campañas publicitarias, como la última que ha hecho con Estrella Damm. La artista de Sabadell nunca tiene lo suficiente y está intentando llegar al siguiente nivel. De componer canciones para pasárselo bien a estrenar disco nuevo, Discordia, y hacer gira por México en una misma semana. ¿Dónde puede llegar la Santa?
El disco empieza fuerte. Sólo el título, Discordia, ya es toda una declaración de intenciones.
Totalmente. Discordia quiere decir que estás en desacuerdo. El disco gira en torno a la idea de que el amor te lleva a puntos muy contrarios entre ellos. En este punto está donde aparece la discordia.
Por lo tanto, ¿es un disco que conceptualmente gira entorno el amor?
No. El amor se puede ver y vivir de muchas formas. No sólo existe el amor de pareja. Existe la pasión por lo que te gusta hacer, el placer de pasear por un prado de flores... Hay otros vínculos o estados que te pueden llevar un sentimiento similar al del amor con la sensación de felicidad y plenitud que lo acompañan. Por otra parte, en el disco hay canciones, como 'Cadena de plata', que no tienen nada que ver con el amor. En este caso, simplemente reflexiono en torno al infierno imaginándome allí.
En este disco también exploras el Cielo, el Infierno y la Tierra. ¿Cómo llegaste a este concepto?
Intentando darle tantas vueltas como ha sido posible al disco. Buscando crear una idea que compactara el trabajo, me parecía interesante dividir el disco en tres partes y que cada una de ellas evocara unos sentimientos y sonidos diferentes. En el cielo tenemos, por ejemplo, canciones acústicas o lo-fin, a la tierra he sacado mi parte salvaje y juguetona, y en el infierno he experimentado con el trap o el rap.
Tu música siempre ha tenido una carga de rabia bastante alta. En cambio, en este disco hay otras pulsiones importantes como el amor o la alegría. ¿Cómo ha estado esta evolución?
Simplemente, he escrito lo que sentía. Cuando escribía sobre temas más revolucionarios o de protesta era porque pasaba por un momento en que estaba muy enfadada con el mundo y tenía mucha ira dentro. Ahora estoy viviendo otras cosas y me nace hablar de estas.
Vaya, que has superado una etapa, tanto vital como musical, mucho más rabiosa y destructiva.
Yo antes estaba supercabreada y me gustaba mucho ir a manifestaciones, juntarme con las colegas del sindicato... Y, por lo tanto, quería hablar de eso en mi rap. Ahora tengo otras motivaciones. Además, he ido creciendo como artista, y encuentro más interesado y complejo hablar de cosas más metafóricas, que insultar en el gobierno, por ejemplo.
Encuentro más interesado y complejo hablar de cosas más metafóricas que insultar en el gobierno
Siguiendo con el proceso compositivo. Hace más de un año que empezaste a ser gestar este disco. ¿Ha sido uno pesado?
No, he hecho el proceso que quería. Quería estar mucho tiempo currando porque he visto que, sin llegar a ser enfermizo, es muy importante darle la vuelta a las cosas y no ser conformista. Durante el invierno pasado, me marché a una masía acompañada de mis productores y de mis amigas artistas. Estuvimos ideando este disco. Todo el mundo pudo aportar su grano de arena.
¿Con cuántas ideas entraste y con cuántas saliste de este retiro creativo?
Íbamos con alguna idea y dos canciones medio pensadas. Salimos de allí, no con el disco hecho, obviamente, pero sí con pequeñas ideas, vueltas, rodeo por las que tirar... Sólo hubo dos canciones que se crearon y compusieron totalmente cuando nos marchamos.
Como experiencia creativa conseguir perfilar gran parte de un disco en una semana debe ser brutal.
Salió todo superredondo. Además, piensa que éramos mucha gente aportando ideas. Por otra parte, muchas eran ideas de un minuto de canción, que estas se pueden conseguir medianamente deprisa. El trabajo real es en el momento de desarrollar todo el tema, es lo que lleva más tiempo.
Si por alguna cosa destaca este trabajo, es por su eclecticismo estilístico. ¿Fue una idea a priori o surgió en el proceso?
La idea fue mía. Decidí hacer un disco y tocar los máximos estilos musicales que pudiera, hacer alguna cosa especial. En este proceso me han ayudado tres productores y el DAAX.
Imagino que para poder interpretar tantos estilos necesitabas rodearte de más de un productor para que te ayudaran a encontrar la esencia de cada género.
Obviamente. Sí que he tenido la capacidad de identificar como quería que sonara cada canción que quería hacer. Pero estar rodeada de tres músicos que saben lo que hacen, ayuda.
Por otra parte, que sea un disco donde la producción es tan importante, y que esta no esté en tus manos puede ser delicado. ¿Te inquietó en algún momento?
¿Si yo no sé hacer mezclar y producir porque tengo que rayarme? La clave es saber identificar a qué persona tiene la capacidad para producir, mezclar y masterizar como tú vuelos. Piensa que para hacer una canción participan muchas personas, no lo puede hacer todo una persona sola.
Sí que es verdad que es un proceso colectivo pero tampoco es normal que un artista trabaje con cuatro productores de forma paralela.
Sinceramente, me he inspirado en los grandes músicos profesionales. Estos se pueden llegar a rodear de cincuenta músicos para hacer un disco. Además, quería experimentar con trabajar con mucha peña. Hasta ahora, siempre había sido un proceso en el que DAAX y yo nos encerrábamos en el estudio. Con este disco he intentado dar un paso hacia adelante como artista.
¿Un paso hacia adelante o un renacimiento de Santa Salut? Porque en este trabajo encontramos poco de tu característico boom bap.
En el disco sigue habiendo boom bap eeee (Risas). Más que un nuevo inicio, es una evolución. Durante este tiempo he aprendido mucho y ahora sé que puedo hacer muchas más cosas que las que mostraba en los primeros trabajos. Al principio, hacía música para pasármelo bien y no aspiraba que nadie me escuchara ni viniera a mis shows. La perspectiva ha cambiado y, por lo tanto, quiero hacerlo lo mejor posible.
Haciendo un poco de retrospectiva, has pasado en poco tiempo de hacer música para disfrutar, a, en la misma semana, sacar disco nuevo y marcharse de gira por México. ¿Cómo está viviendo esta explosión?
Pues no lo sé. Emocionalmente, el subconsciente hace mucho y a veces te piensas que estás mucho tranqui y realmente estás muy nerviosa. Soy una persona muy nerviosa y claro que tengo nervios, pero del que tengo ganas es de seguir sacando cosas, dar conciertos... Por mucho que el disco funcione bien, sólo será el siguiente paso para seguir avanzando.
Tú de vocación eres rapera y, por lo tanto, escribes barras. Pero en este disco te has lanzado con estrofas y estribillos. ¿Qué es más fácil de escribir para ti?
Para mí son más fáciles las barras aunque cada vez tengo más facilidad con los estribillos. Así y todo, hacer una vuelta es muy difícil; que todo cuadre y tenga sentido.
Existe la voluntad de proteger el catalán desde el rap
¿Con alguna canción sufriste para que no llegara a ver la luz?
Con 'Self Love' hubo momentos que sufrimos. Teníamos claro que queríamos una cosa rollo G-funk, pero faltaba alguna cosa para redondear el tema. De repente, me iluminé y dije: ¿y por qué no le metemos drill?
En este disco colaboras con Swit Eme, Elane y Sofía Gabanna, que más que amigos, parecen que ya sean parte de tu familia.
Para este disco quería que todo el mundo que ha estado en mi proceso como artista, formara parte. También se intentó hacer alguna cosa con Flashy (Ice Cream), pero no hubo tiempo.
Hablando concretamente de Elane y Sofia Gabbana, en las redes se puede observar que compartís una amistad muy sincera y bonita. Creo que son dos artistas que les falta foco mediático teniendo en cuenta sus propuestas. ¿Estás de acuerdo?
Creo que ahora justamente Sofía está recibiendo mucha más atención y el Elane 100% se merece mucha más. Su proyecto aporta unas ideas y una filosofía superguay. Todo el mundo se puede sentir identificado con sus letras y lo que hace.
¿Reuniendo tantos estilos, me podrías decir cuáles han sido algunos de los referentes que has tenido para crear Discordia?
Como disco, he tenido presente el nueve de la Nathy Peluso. Fusiona muchos estilos y con mucho gusto. Si te tuviera que decir alguna canción, me ha servido de inspiración Bohemian Rapsody. Tiene partes muy diferentes entre ellas, pero encajan perfectamente, y eso me flipa.
Una marca de la casa es utilizar el catalán como un recurso estilístico. Me recuerda a la manera con la cual la música urbana en Latinoamérica utilizan el inglés.
Yo no me puedo forzar creativamente a escribir en un idioma u otro. Si no me está saliendo alguna cosa en catalán y, por lo que sea, sí en castellano, no sale y punto. Tengo voluntad de hacer más cosas en catalán. Toda la vida he escuchado rap en castellano y lo que nos pasa a gente acostumbrada a escuchar rap en castellano es que hasta que no escuchas a alguien que te afila rapeando en catalán, todo te suena extraño. Por suerte, cada vez hay más rap en catalán, como La Masia. Y sí que existe la voluntad de proteger el catalán desde el rap. Se tiene que potenciar nuestra lengua, que se está perdiendo, y yo lo he hecho como me ha salido.