Ni con el festival de Glastonbury ni con el Madison Square Garden. Consiguieron dar la vuelta al mundo a través de su terraza, escenario de tres jóvenes que a golpes de cubo y de guitarra animaron a miles de personas con su música. Claro está que a todo el mundo no. 'El grupo del confinamiento' también se convirtió en 'los pesados del confinamiento' para mucha gente. Y en esta entrevista los Stay Homas abordan este tema: "Si éramos pesados no era por colgar muchas canciones, sino por los medios de comunicación". Acaban de publicar una mixtape, Here2Play, con colaboraciones de Manu Chao y Rubén Blades, además de Juanito Makandé i Vic Mirallas; una recopilación de temas que suenan mejor que sus últimas entregas. En la entrevista con el Revers de ElNacional.cat no asiste Rai Benet porque sufre migraña; pero los otros dos miembros del trío divertimento, Guillem Boltó y Klaus Stroink, hablan sobre la industria musical, reflexionan sobre qué implica haber dejado de vivir juntos y dejan claro que, dos años después del confinamiento, el grupo no tiene ningún discurso.
Guillem Boltó y Klaus Stroink, dos tercios de Stay Homas. / Foto: Sergi Alcàzar
¿En qué consiste esta mixtape que publicáis?
Guillem Boltó: Es un divertimento. Hemos recopilado canciones que habíamos hecho en la terraza y que no queríamos dejar atrás. Teníamos ganas de dar otra vuelta a estos temas y trabajarlos en el estudio y hacerlas lo más guay que hemos sabido. No es ninguna otra cosa que un divertimento.
¿Son canciones que habíais descartado para vuestro primer álbum?
Klaus Stroink: No, no. Si ahora tuviéramos que escoger seis canciones de todo nuestro repertorio, ahora mismo escogeríamos estas. De hecho, es lo que decidió la gente cuando lo pusimos a votación. Ahora ya hace un año y medio que no publiquemos nada, y consideramos que teníamos que publicar algunos avances que habíamos hecho, pero con la calidad de estudio.
¿Tal como funciona hoy día la industria, en un mundo de plataformas y singles, tiene sentido sacar un álbum?
G.B: No ha dejado de tener sentido, pero sí que se ha desdibujado mucho. Los artistas hoy día sacan muchos singles y van sobre la marcha. Hay gente que hace un tema cada mes, como una máquina de churros. Y con respecto a nosotros... Hoy por hoy tenemos ganas de hacer las cosas con calma; y hacer un álbum es una responsabilidad mayor que si vas haciendo los singles de uno en uno.
¿Cómo habéis conseguido convencer a Manu Chao y Rubén Blades para que toquen con vosotros?
K.S.: Con mucha pasta y mucha droga (los dos ríen). La verdad es que nosotros tampoco lo sabemos. Con Manu Chao tenemos un amigo en común que nos dijo de hacerle la propuesta, y le convenció aquello que le enviamos. Y Rubén Blades nos escribió diciéndonos que estaría bien llamarnos, y desde entonces hemos estado en contacto.
Rubén Blades nos escribió diciéndonos que estaría bien llamarnos, y desde entonces hemos estado en contacto
¿Cómo ha sido el método de trabajo con ellos?
G.B: Nosotros pensábamos en una idea y entonces se lo enviábamos. Si a ellos les parecía bien, entonces lo acabábamos de perfilar. Y a partir de entonces ellos hacían su parte de la canción y nos lo enviaban.
¿No habéis trabajado nunca juntos en el estudio?
G.B: No. De hecho, ninguna de las colaboraciones de esta mixtape ha trabajado conjuntamente con nosotros en el estudio. Ha sido todo telemático.
¿Qué me podéis decir de la producción de este nuevo trabajo? ¿Habéis explorado algo diferente?
K.S.: Sí. Hemos explorado cosas diferentes porque hemos hecho temas diferentes, y deseo y espero que siempre que sacamos una cosa nueva hayamos explorado una vía de producción diferente, porque, si no, habrá querido decir que hemos encontrado la fórmula secreta, y no es el caso. También encontrábamos muy adecuado cumplir una fantasía e ir a grabar una canción en Abbey Road. Y así lo hicimos. Fuimos un par de días.
¿Y grabar en el mismo lugar que los Beatles es tan guay como parece?
K.S.: Cualquier expectativa que te hagas se quedará corta. Es de primer nivel. Cualquier instrumento que pidas... te traen lo mejor que existe. Hay muchísima gente trabajando y muy buenas vibes... Es en plan: "estoy en la sala tres, donde se han hecho discos de los Beatles y no sé qué disco de Pink Floyd".
G.B: Y utilizando los instrumentos de la época. Hemos utilizado los micros de la batería de Ringo y del tema 'Ob-La-Di, Ob-La-Da'.
Hablemos un poco del fenómeno. ¿Seguís viviendo en el piso que os hizo famosos durante la pandemia?
G.B: No, ya no. Se nos acababa el contrato y, además, si teníamos que ser amigos, compañeros de grupo y compañeros de piso... al final nos habríamos quemado y nos habríamos llevado al trabajo los marrones de casa. Y también al revés. Y nos enfadaríamos. Y tomar aire y echarnos de menos un poco también nos irá bien.
¿Cómo vivís el hecho de no vivir juntos? ¿Cómo influye en el grupo?
G.B: Ahora que ya no compartimos piso valoramos más el tiempo que pasamos juntos y nos queremos más. Eso sí, si tenemos un tiempo para currar es porque hemos quedado por currar. Y si hacemos recreo es porque hacemos recreo.
Stay Homas en su encuentro con Revers de ElNacional.cat. / Foto: Sergi Alcàzar
Ahora que ya no compartimos piso valoramos más el tiempo que pasamos juntos y nos queremos más
¿Y qué ha pasado con el piso de la terraza?
G.B: Pues debe vivir alguien, pero ninguno de nosotros.
Alguna vez habéis mencionado que hacéis música en varios idiomas fruto de la espontaneidad. ¿Eso sigue siendo así? También es cierto que ahora tenéis más tiempo para pensaros en qué lengua cantáis cada tema.
K.S.: No sé qué decir. Si intento imaginarme el día que empezamos a hacer acordes y crear una letra... O en qué idioma nos sale hacer la primera propuesta... No recuerdo ser consciente de todo eso. No recuerdo haber hecho ningún proceso cognitivo.
G.B: Si alguna cosa debemos haber tenido en cuenta es qué estilo musical estamos haciendo. Y quizás eso hace que nazca de manera orgánica hacer uso de una lengua u otra.
¿Os cuesta sacaros la etiqueta de 'grupo del confinamiento'?
K.S.: Hombre, sí... Otra cosa es que eso nos haga palo o no. Era un momento muy gordo y ha pasado poco tiempo.
G.B: La gente que llegó a nosotros por el fenómeno seguramente se acabará desinteresando, y quien se quede será por nuestra música.
Seguramente habrá mucha gente que no os escuche nunca por ser 'los pesados del confinamiento'.
G.B: Hemos aprendido mucho desde entonces. Hay un punto de sobreexposición mediática que excedimos nosotros y que no nos ayudó. Si éramos pesados no era por colgar muchas canciones, sino por los medios de comunicación. En un momento en que solamente daban malas noticias, necesitaban publicar cosas positivas. Gracias a Dios ahora todo se ha calmado, pero todavía llevamos encima la losa del buenrollismo. Acabamos de publicar una mixtape en la cual la mayoría de los temas son depresivos. Decimos que la vida es una mierda, sin ninguna necesidad de animar a nadie.
Here2Play es la nueva mixtape de Stay Homas. Foto: Sergi Alcàzar
En un momento en que solamente daban malas noticias, los medios de comunicación necesitaban publicar cosas positivas
Sí que es cierto que la gente os ve como unos "Mr Wonderfuls" musicales.
K.S.: Esta es la visión que tendrá algún círculo. No sé, hay mucha gente en el mundo. No sé si es posible hacer una media mundial sobre cuál es la opinión pública sobre alguna cosa.
G.B: Quien nos diga eso no habrá hurgado mucho en nuestra discografía. El día 20 de confinamiento ya no estábamos haciendo buenrollismo. Pero entiendo que la gente que no haya escuchado mucho nuestra música pueda pensar eso.
¿Y pues, cuál es vuestro discurso a día de hoy?
G.B: (ríe) No tenemos.
Cuesta de encontrarlo, cierto.
K.S.: ¿Te refieres a las letras?
Lo que consideréis vosotros. ¿Cuál es vuestro discurso como artistas?
K.S.: Creo que es enteramente musical. No sé si hay un hilo argumentativo que pueda tener un sentido desde un principio... creo que ha sido un viaje musical, y lo está siendo. Es que tampoco sé si mis grupos preferidos tienen discurso.
Cuando arrancó el confinamiento se podía considerar que teníais un discurso de optimismo hacia la pandemia. ¿Dos años después cuál es vuestro discurso sobre el mundo? ¿Cuáles son vuestras inquietudes como artistas?
G.B: Pues explicar nuestras vivencias. En algunos temas lo hacemos desde una cara más simpática y en otros desde una cara más crítica. Algunas veces lo hacemos a través del pop y otras con aquello que quiera considerar la gente. Durante el confinamiento todo el mundo vivía lo mismo y creo que en ningún momento hemos querido impostar una manera de ser que no fuera la nuestra.