Hoy los aficionados del fútbol van a disfrutar: hablaremos de la terminología futbolística en catalán. Este deporte fue importado por extranjeros a finales del siglo XIX (solo hay que mirar quiénes eran los fundadores del Barça: la mitad eran ingleses, alemanes y suizos). Por eso en catalán la gente utilizaba la terminología inglesa. Empezando por el nombre del deporte, que en catalán escribían foot-ball (aunque lo pronunciaban como lo hacían los ingleses: "futbol"). En los años 30 del siglo XX, el semanario Priorat (publicado en Falset) daba noticia de un interesante partit de foot-ball (escrito así) entre el Falset y el Marçà, dos pueblos vecinos.

Los elementos del juego, pues, en origen se decían con la palabra inglesa. Por ello, si el objetivo de dicho deporte es introducir la pelota dentro de un rectángulo bastante grande, esto se llamaba goal, que en inglés significa 'objetivo, meta'. Hoy lo escribimos catalanizado, gol, reflejando la pronunciación original inglesa, que es tal y como lo decía la gente catalanohablante de aquella época.

Otras voces: xut 'acto de impeler la pelota con el pie', de shoot 'disparar'. Si hay que chutar el balón desde la esquina (porque ha salido por la línea de fondo y el último en tocar el balón fue un defensor o el portero), lo llamamos córner, del inglés corner 'esquina'. Y si un atacante se encuentra entre el último defensa y el portero cuando un compañero del atacante le pasa la pelota de más atrás, se dice que el atacante está off-side (pronunciado "ofsaid"); esto a menudo se dice en catalán fora de joc ('fuera de juego'), pero en catalán tradicional también se ha usado el anglicismo, levemente modificado: de ahí la bella palabra catalana orsai.

No siempre el anglicismo se queda

Algunas palabras de esas fueron dejando paso a formas catalanas. El rectángulo donde se debe introducir la pelota se llama porteria y el jugador que hay allí se llama porter, formas que rápidamente se pusieron en circulación (a pesar de las reticencias de algunos, ya que estos términos podían confundirse con los porteros y las porterías de los grandes edificios de Barcelona). Otro caso es penalty, que en inglés designa una falta cometida por los defensas a los atacantes dentro del área (muy cerca de la portería), lo que implicaba un tiro directo a la portería donde solo está el portero. En catalán esto se llama penal. Hay gente que dice penalti (como en castellano), pero, como ya demostró Fabra a principios del siglo XX, no tenía sentido llamarlo penalti porque eso, en inglés, se pronuncia pénlti.

Joaquim Maria Puyal, que desde finales del siglo XX retransmitió los partidos de fútbol del Barça por Catalunya Ràdio, continuó diciendo algunos anglicismos que por aquel entonces ya no se empleaban, como hands (por tocar el balón con las manos, acción no permitida en fútbol. pronunciado con aspirada inicial y e abierta) y out (para cuando la pelota sale por un lado, pronunciado con a). La razón es que en origen en catalán se utilizaban esas palabras.

Eso revela que la presencia de anglicismos en catalán no es un fenómeno de ahora, sino que viene de lejos. Visto con perspectiva, podemos preguntarnos: ¿por qué la gente sigue escribiendo software si dejamos de escribir foot-ball y pasamos a escribir futbol?