Las Fiestas de Gràcia'21, entre la tradición y las restricciones de la covid-19
Gràcia se ha vuelto a vestir de fiesta a pesar de la situación sanitaria actual. Han vuelto a las calles del barrio los decorados, los conciertos, las actividades tanto para los más pequeños como para los más mayores... Adaptadas, pero, a los protocolos de seguridad y a las restricciones vigentes por la covid-19. Los decorados aéreos, los aforos limitados y las reservas previas para evitar concentraciones han estado en la agenda de esta Fiesta Mayor de Gracia. Las mascarillas también han sido el accesorio que no ha podido faltar, y los horarios marcados por el toque de queda –casi presente durante todas las fiestas–. Tampoco se ha podido bailar con normalidad o consumir bebidas ni comer fuera de los espacios habilitados para hacerlo. A pesar de todo, la edición de este año nos ha dejado una serie de imágenes donde se deja ver la esencia de esta fiesta bicentenaria adaptadas a las circunstancias de pandemia actuales, y que permiten hacer una pequeña muestra.
Con la mirada hacia arriba para ver los decorados
La parte más emblemática de las Fiestas de Gràcia son los decorados que construyen los vecinos durante el año, que convierten las calles del barrio en una explosión de colores y formas durante los días de fiesta mayor. La covid-19, pero, ha obligado que los decorados tengan que ser aéreos y que los laterales ocupen el mínimo, para evitar elementos que obstaculicen y dificulten el flujo de gente, para no generar aglomeraciones. / Foto: Montse Giralt
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Actividades familiares durante el día
Otra de las limitaciones de este año ha sido que los espacios que decoraban podían organizar un total de tres actividades y un concierto al día. En la programación de este año han prevalecido las actividades diurnas y dirigidas para todos los públicos. En la plaza de la Vila, los más pequeños ríen, bailan y, incluso, hacen el trenecito con el animador infantil Jaume Barri en espacios delimitados en el suelo para preservar los grupos burbuja. / Foto: Montse Giralt
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Reservas y citas previas para gestionar los aforos
Para controlar los aforos de las actividades, la organización facilitó un sistema telemático de reservas. Todas las actividades eran gratuitas y algunas llegaron al aforo completo antes de que empezaran las fiestas, así que varias personas se quedaron en lista de espera para poder disfrutar de algunos de los eventos programados durante las fiestas. / Foto: Montse Giralt
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Protocolos a la hora de consumir bebidas y alimentos
Otra de las diferencias que se han visto en las calles del barrio de Gràcia durante estos días de fiesta han sido las mesas y sillas separadas de las zonas de concierto que han habilitado los organizadores de los espacios decorados para que la gente pudiera consumir sentada, puesto que por las restricciones actuales sanitarias no estaba permitido entrar con consumiciones a los recintos de los espectáculos. / Foto: Montse Giralt
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21 calles decoradas
El contexto actual de pandemia no ha parado a los vecinos a seguir con la tradición de los decorados de las calles de Gràcia, que se remonta a 1817. El año 1997, la Generalitat de Catalunya le concedió el distintivo de Fiesta Tradicional de Interés Nacional. La fiesta reúne a miles de visitantes que no se han podido resistir a visitar las calles del barrio estos días para ver los decorados, actualmente hechos con materiales reciclados. / Foto: Montse Giralt
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Suspendido el concurso de decorados de calles de la Fiesta Mayor
Una de las fechas con más expectación por los vecinos del barrio cada año es el 17 de agosto, el día que se celebra la entrega de premios de las calles decoradas. Desde que llegó la covid, pero, que no se celebra este concurso. Los vecinos, de todos modos, han seguido poniendo todos sus esfuerzos para seguir con esta tradición y el jurado decidió repartir menciones especiales en cada calle. A pesar de no disputarse ninguna calle el primer premio, esto no ha sacado a los vecinos las ganas de celebrar este momento con el mismo entusiasmo que los otros años. / Foto: Montse Giralt
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Los escenarios más grandes, situados en puntos concretos del barrio
Para evitar las aglomeraciones en espacios más pequeños, este año se han habilitado tres escenarios grandes en lugares amplios del barrio para poder albergar a más personas. Los tres espacios nuevos eran el escenario Joanic, el escenario Pi i Margall y el escenario Bailèn. Durante estos días han pasado artistas como Elena Gadel, Mazoni, Jo Jet i Maria Ribot, Sanjosex o Sabor de Gràcia, entre otros. / Foto: Montse Giralt
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Miradas interesadas
Una de las escenas curiosas y atípicas que han dejado estas fiestas mayores han sido la de ojos curiosos mirando a través de los agujeros que había a las lonas que rodeaban los espacios de conciertos y actos culturales. / Foto: Montse Giralt
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Vuelven las noches musicales
El retorno a la presencialidad de las fiestas de Gràcia ha vuelto a llenar el programa de noches musicales. Aún las restricciones sanitarias y los protocolos, varios artistas de estilos muy diferentes han vuelto a subir a los escenarios durante estos días. / Foto: Montse Giralt
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Reprimiendo las ganas de bailar
Una de las restricciones actuales que ha puesto más a prueba a los asistentes de las fiestas de Gràcia ha sido la prohibición de bailar en los eventos musicales. Los asistentes han tenido que contener las ganas de saltar de la silla y de cantar durante los conciertos más animados de esta fiesta mayor. / Foto: Montse Giralt
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Disfrutar del concierto sin reserva previa
Dado que este año a los conciertos se tenía que asistir con cita previa, muchas personas se quedaron en lista de espera sin poder entrar. La música, pero, ha atraído a la gente y estas se las han ingeniado para poder disfrutar del concierto, aunque fuera desde los alrededores de la valla. / Foto: Montse Giralt
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Lucimiento estático de fuego pone el punto y final de las Fiestas de Gracia
Gràcia cierra su fiesta mayor con un gran correfoc atípico. En lugar del habitual recorrido que llenaba de olor de pólvora de las calles del barrio y donde podíamos ver a los más osados bailando entre las chispas, se ha cerrado la calle Còrsega desde Bailèn hasta Jardinets de Gràcia para dejar paso al lucimiento de fuego de este año, que se podía ver detrás de la valla, con reserva previa y sentados. No obstante, más de uno saltó de la silla con la llegada de Atzeries, la bestia de la Colla la Vella de Gràcia, así como del resto de bestiario de fuego que desfiló. / Foto: Montse Giralt