"Mucho más que Gilda" es el título del ciclo que la Filmoteca ha programado este septiembre, y que empieza este sábado, con el fin de conmemorar el centenario del nacimiento de Margarita Cansino, Rita Hayworth, la actriz que se hizo famosa en los años 1940. En nuestro país siempre será recordada por Gilda y, sobre todo, por la escena en que se quitaba un guante con exquisita sensualidad. En pleno franquismo, cuando la censura dominaba y los recortes imperaban en los rollos de filme, muchos catalanes estaban convencidos de que en la película original, Hayworth se sacaba mucho más que el guante. El resto quedaba a la imaginación de cada uno, y Rita Hayworth y su guante se convirtieron en mito.
Ahora, la Filmoteca quiere demostrar que Rita Hayworth era mucho más que un guante. La sex-symbol de los años cuarenta, a quién llegaron a llamar "La diosa del amor", y que quedó encasillada en su categoría de femme fatale, era mucho más que un emblema del glamour. La Filmoteca en este ciclo ha programado 12 películas de la actriz norteamericana, que ofrecen una visión más compleja de ella. Evidentemente, no podía faltar Gilda, que se podrá ver este sábado a las 19h y este domingo en las 21h30. También se podrá ver La dama de Shanghái, la película dirigida por su ex-marido Orson Welles en que Hayworth aparece con su melena pelirroja cortada y teñida de rubio. Y también se proyectará Chica de portada (Cover Girl), la mejor película de género musical de la actriz, en la que colaboró con Gene Kelly.
Margarita Carmen Cansino (1918-1987) era hijo de un bailarín sevillano y de una actriz inglesa, Volga Hayworth. Cuando era niña ya bailaba en la compañía de la familia. A los 16 años empezó a hacer de actriz de cine, con el nombre Rita Cansino (que después cambiaría por Rita Hayworth, tomando como pseudónimo el apellido de su madre). Hizo papeles secundarios en muchas películas y no destacó hasta que Howard Hawks la reclutó para Only Angels Have Wings, en 1939. Ahora bien, la película que la hizo saltar a la fama fue una versión de Sangre y arena de Blasco Ibáñez en que Hayworth seducía a Tyrone Power. Pero si por una película se recordada Haywort es por Gilda, un filme noir de Charles Vidor (1946), película en que, además de la escena del guante, marcaba la cara de Glenn Ford con una bofetada. Pero la femme fatale era mucho más frágil en la realidad que en las películas. Hayworth se casó cuatro veces (una de ellas con el multimillonario Agá Khan), y tuvo alguna aventura amorosa memorable. Pero no se sentía feliz; aseguraba que los hombres "se van en la cama con Gilda y se despiertan con María Cansino". Su carrera declinó progresivamente. Sorprendentemente, nunca ganó ningún Óscar (en realidad, ni siquiera fue nominada a ninguno). Hacia los 50 años empezó a enfermar de Alzheimer y eso le impidió actuar correctamente. Moriría a los 68 años, con la memoria completamente destruida.