En el artículo anterior veíamos palabras propias del tortosino; hoy tocaremos las expresiones. En las Terres de l'Ebre, la sandía se denomina meló de moro y no síndria (como Barcelona el maiz se denomina blat de moro y no panís), por oposición al melón (que en las Terres de l'Ebre se denomina meló pero, si hay que precisar, dicen meló de tot l'any). Igualmente, el pavo real también se dice en catalán gall dindi o indiot; pero los tortosinos han dicho siempre titot. La filóloga Àngela Buj Alfara, en su tesis doctoral, reporta la expresión Pareix un titot! —'parece un pavo real'— para referirse a alguien envanecido.

Una palabra curiosa es adhos, que significa 'incluso' o 'todavía'. Se decía bastante a principio del siglo XX, pero hoy en día se dice muy poco. El filólogo tortosino Carles Castellà, en su estudio El tortosí del Baix Ebre i l'estàndard. Descripció lingüística, anàlisi i propostes (2018), indica que, a principio del siglo XXI, solamente lo usa la gente mayor de algunos pueblos del sur del Baix Ebre. Justo es decir, pero, que esta palabra suele acompañarse con otras palabras, como ara —'ahora'— (entonces significa 'incluso ahora'), que (—'aunque'—) y otras (adhos així, adhos sense). Ejemplos extraídos del Diccionari català-valencià-balear (la forma sin s final también se ha dicho tradicionalmente): Adho que fos així, no n'hi ha per desesperar-se (—'aunque fuera así'—); o bien: Va estar molt malalt; adhos ara se li coneix —'todavía ahora'—. Y ejemplos extraídos del estudio de Castellà: Encara adhos així [ficant-hi lleixiu] lo vi fa crostes a l'aïna (—'aún así, echándole lejía, el vino genera costras en el recipiente'—); Adhos ara els fiquen una túnica (—'todavía hoy en día les ponen una túnica'—); Al tupí s'hi anava coent adhos sense ficar-ho damunt [del foc] (—'se iba cociendo en el cazo pese a no ponerlo encima del fuego'—).

Allá todo el mundo se interpela con 'xeic!'

Por las calles de las Terres de l'Ebre puede oirse a alguien que llama a otro diciendo xeic! (o eic!). También se usa como expresión de sorpresa o de reproche: Xeic, no m'ho faces, això! Seguramente es una deformación de xic —'pequeño, chico' y 'chiquillo'— (talmente como el xe valenciano; en la zona de Tarragona no es extraño oír xec con el mismo valor). Puesto que hablamos de la palabra xic, para decir que una cosa tiene un tamaño reducido en tortosino puede decirse tanto petit como menut (que se encuentra en otras zonas de Cataluña) como xicotet (a veces modificado fonéticamente en xucutet). Y puesto que hablamos de niños, para decir a un niño que vaya despacio, la palabra más corriente entre ebrenses es espai (Ves espai o cauràs!). Pueden decirlo con el sufijo diminutivo -et (Ves espaitet o cauràs!).

Otras expresiones del habla ebrense son andossié!, usual en Tortosa para decir 'adiós', pollar-se de calor —'morirse de calor'— o no tocar vores para cuando alguien dice cosas sin sentido (también utilizan el verbo desbarrar). Esta última expresión podría ser no tocar hores (en otras zonas se dice que alguien no toca quarts ni hores para indicar lo mismo), pero hay dos vocales en contacto y, cuando pasa esto, el catalán suele poner enmedio una consonante como v (para decir a on —'donde'— hay gente que dice auon o agon o avon). La existencia de la palabra vora —'borde'— debía de ayudar al cambio. Finalmente, los ebrenses (sobre todo hombres), cuando deben calificar muy positivamente una comida, dicen que es mamella de monja (que la gente religiosa no nos "malde" ni nos "clame"; maldar y clamar es como dicen en el Baix Ebre y en el Montsià, respectivamente, el hecho de regañar a alguien).