El tiempo pasa, las tendencias cambian, pero al final, al final, al final, al final, al final.... el pop y el rock, desde que cuatro irreverentes de Liverpool irrumpieron en escena el año 1962 cantando aquello de "she loves you, yeah, yeah, yeah", siempre están allí. Porque no hay nada más gratificante que cuatro tipos o tipas, sean los Beatles o sean los Sex Pistols, los Ramones o los Smiths, Nirvana o Green Day (bien, estos eran tres, en los dos casos), los Arctic Monkeys o The Strokes, Los Planetas o Carolina Durante, colgadas de una guitarra y cantando con atractiva dejadez las vicisitudes y angustia y ansiedad existencialista de tener veinte años.
🎸Carolina Durante: "El melodrama es un coñazo"
Antes Carolina Durante molaban y ahora molan más
Tirando del manual del crítico pedante e insoportable, diré que me gustaron mucho más cuando actuaron en la Sala Apolo una fría noche de diciembre de 2019. Cuando no eran más que una promesa inflada hasta casi petar... Entonces los madrileños Carolina Durante habían acabado de publicar su primer disco, un álbum homónimo que era pop de melodías incontestables interpretadas con la urgencia del punk: La noche de los muertos vivientes, Cayetano, Perdona (Ahora sí que sí)... Fue aquello, que tanto nos gusta decir, de estar viviendo una noche especial, de aquellas de poder alardear en un futuro, yo fui, aunque en el resto de la humanidad se la pele si estuviste o no. Fue un concierto cargado de energía, urgente y sulfuroso, espídico y entusiasta. Sí, mejor que los dos que han ofrecido este fin de semana en el Sant Jordi Club de Barcelona. Menos ambicioso escénicamente (ahora llevan un show bastante impresionante, con un escenario que recrea una oficina, con ellos vistiendo de americana y corbata, y saliendo a fichar, es decir a tocar, mientras suenan las notas de la banda sonora de la serie The Office), pero más auténtico y visceral.
Tonterías. A la mierda la falsa actitud y honestidad del underground y aquello de que ellos molaban más cuando solos les conocían los lectores de la Rockdelux. Carolina Durante molaban entonces y molan (y molan más: su último disco, Elige tu propia aventura, es un magnífico ejercicio de evolución formal sin ínfulas) ahora que reúnen además de 5.000 personas durante dos noches seguidas en el Sant Jordi Club de Barcelona. Dos noches en que todas las caras de mi alrededor dibujaban una enorme sonrisa de felicidad cantando a pleno pulmón Joderse la vida, Tempo 2, Verdes, Césped, Joder, no sé, Elige tu propia aventura, Hamburguesas, Normal, Las canciones de Juanita... Canciones de dos minutos y medio que no prometen nada más que una contagiosa progresión de tres acordes y unos versos que nos recuerdan que la vida, sobre todo cuando eres joven, puede ser una puta mierda, pero qué divertido es vivirla. Por eso hemos quedado para ir a ver a los Carolina Durante, y hemos bebido, y nos hemos drogado, y nos hemos amado. Y porque nos han echado, sino todavía estaríamos allí.