Siempre se ha enseñado que el catalán-valenciano tiene dos grandes bloques dialectales: el occidental (que incluye el Principado de Andorra, la Franja oriental de Aragón, la mitad oeste de Cataluña, el País Valenciano y la comarca murciana de El Carxe) y el oriental (que incluye la mitad este de Cataluña, la Cataluña francesa, las Baleares y la ciudad de L'Alguer, esta última en Cerdeña). Es como si, tomando un mapa, dibujáramos una raya de norte a sur.
Esta división se basa en el vocalismo, es decir, la forma de pronunciar las vocales. Así, cuando las vocales son átonas el bloque occidental dice 5 (A, E, I, O, U) mientras que el bloque oriental dice 3 (I, U, vocal neutra). Asimismo, la pronunciación de algunas E tónicas (las provenientes de I breve y E larga del latín, más alguna otra), en palabras como cadena, pera, aparèixer, francès o tres, suenan con vocal neutra tónica en la mayor parte del balear y con E abierta en la mitad oriental de Cataluña (y en algunos lugares de las Baleares), mientras que suenan con E cerrada en el bloque occidental (y también en L'Alguer). Finalmente, los verbos de la III conjugación (en -ir) en oriental la extensión se dice con E (pateix 'sufre' del verbo patir 'sufrir') y en la mayoría del occidental se dice con I (patix). En resumen: según la lingüística oficial, dialectalmente el catalán-valenciano tan solo se divide en oriental y occidental. Sin embargo, eso no refleja la auténtica división dialectal de la lengua.
La partición del dominio lingüístico también debe hacerse con una raya de este a oeste
Si en vez de mirar el vocalismo miramos el consonantismo, la división de los dialectos dibuja una línea que, sobre un mapa, iría de oeste a este. Esta línea dejaría al norte Andorra, la Franja oriental de Aragón, Cataluña y la Cataluña francesa, mientras que dejaría al sur el País Valenciano, El Carxe, las Baleares y L'Alguer.
Efectivamente, si se tiene en cuenta la pronunciación de V y B, los grupos finales NT o LT (pont 'puente' o salt 'salto'), los grupos TLL y TL (batlle y batle 'alcalde', guatlla y guatla 'codorniz') y el sufijo verbalizador -ejar (fosquejar 'oscurecer'), quedan dos zonas claramente diferenciadas, una en el norte y la otra en el sur. Así, en el norte se dice viatge 'viaje' con B, pont y salt sin T final, guatlla con TLL y fosquejar con J, mientras que en el sur se dice viatge con V (si bien la mitad norte del País Valenciano ya lo dice con B), pont y salt con T final, guatla con TL (este último elemento abarca también el extremo sur de Cataluña) y fosquejar con TJ. Por ello, además de la tradicional división entre occidental y oriental, pueden establecerse otros dos bloques: el septentrional y el meridional. Cruzando las líneas salen las cuatro principales variedades geográficas del catalán-valenciano (catalán occidental, catalán oriental, valenciano y balear).
Resumiendo: para una descripción correcta de la división dialectal del catalán-valenciano, es preciso dejar de usar exclusivamente la partición occidental/oriental (basada en el vocalismo) y pasar a usar la doble partición occidental/oriental y septentrional/meridional (basada, esta segunda, en el consonantismo). Esta visión describe con mayor exactitud la variación dialectal del catalán-valenciano.