El Ayuntamiento de Barcelona ha reconocido el cantautor Jaume Sisa con la Medalla de Oro al Mérito Cultural. El acto de entrega del galardón ha tenido lugar la noche de este lunes en el Saló de Cent del consistorio barcelonés y ha sido presidido por la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau.
Underground y contracultural
Nombre destacado de la escena musical barcelonesa y catalana, Sisa (Barcelona, 1948) es también referente del movimiento underground y la contracultura de la Barcelona de los años 60 y 70. Vinculado en sus inicios el efímero Grup de Folk, el año 1968 debutó con el sencillo L'home dibuixat. Posteriormente, formó Música Dispersa, otro proyecto de vida corta, pero con el que dejó uno de los mejores discos facturados en Catalunya el siglo XX, el homónimo Música Dispersa, trabajo de 1970 en que se adentraba en las formas y expresiones más experimentales del rock. Fue la antesala a una trayectoria en solitario de la cual surgieron obras monumentales como Orgia (1971), Qualsevol nit pot sortir el sol (1971), Galeta galàctica (1976) o La Catedral (1977).
Música Dispersa fue la antesala a una trayectoria en solitario de la cual surgieron obras monumentales como Orgia, Qualsevol nit pot sortir el sol, Galeta galàctica o La Catedral
Con la llegada de la década de los años ochenta, Jaume Sisa decidió abandonar el catalán como lengua creativa para iniciar un nuevo capítulo en su trayectoria, ahora en castellano y bajo el nombre de Ricardo Solfa. De aquel periodo surgirían cuatro álbumes: Carta en la novia, Cuando tú seas mayor, Ropa fina en las ruínas, Yo quiero un tebeo. Después de casi una década silencio, en el 2001 reapareció de nuevo como Jaume Sisa con el disco Visca la llibertat.
Inquieto y bohemio
Jaume Sisa es un creador extraordinario, que todavía ahora factura trabajos incunables -su último disco Malalts de cel (2016) es una delicia-, y un intelectual a quien siempre es interesante sino necesario escuchar. Alguna cosa así, como, por su herencia fonográfica, sus razonamientos y manera de entender la vida, y su ademán estético; un Franco Battiato nacido en el barrio del Poble Sec de Barcelona.
El consistorio barcelonés lo considera un músico "inquieto y bohemio" que ha construido "un universo creativo propio tras personalidades diversas
El consistorio barcelonés lo considera un músico "inquieto y bohemio" que ha construido "un universo creativo propio tras personalidades diversas". El 30 de septiembre, el pleno del Ayuntamiento le concedió la máxima distinción de la ciudad por la trayectoria musical y la contribución a la consolidación de la canción catalana.