John Berger (1926-2017) fue un escritor que cultivó varios géneros: desde la novela al guion cinematográfico y televisivo, pasando por el ensayo y la dramaturgia. Esta variedad también se ve reflejada en los temas que plantea. Hasta el 15 de octubre La Virreina Centre de la Imatge acoge una de las mayores antológicas que se hayan dedicado nunca al autor. John Berger. Permanent red cuenta con sesenta dibujos y collages que documentan la producción artística del autor británico. La muestra ha sido comisariada por Valentín Roma. Cada sala de la exposición está dedicada a un tema diferente que él trató en sus obras, ya fueran pictóricas o teóricas. Por ejemplo, hay una sala enfocada al estudio que realizó de los humanos a partir de su relación con los animales. Este pensamiento lo desarrolla en su libro Why look at animales? (1980). La mirada que proyectan los animales hacia a los humanos es una manera diferente de comprender nuestro comportamiento. En cambio, hay una sala donde se exponen las ilustraciones que creó para uno de sus poetas preferidos; Mahmud Darwix (1941 - 2008). Son dibujos a la tinta cargados de una gran dimensión estética y poética.
Sin embargo, en todas sus obras siempre hay un enfoque político, que a menudo gira en torno a las migraciones y de la clase trabajadora. Berger se posicionó firmemente en contra del capitalismo, de la segregación de clases y del mercantilismo de la cultura. Un ejemplo de este último caso son los programas que realizó para la BBC, donde debatía sobre diferentes temas artísticos desde una perspectiva marxista. El más famoso se titula Ways of seeing (1972), con solo cuatro episodios de 30 minutos dirigidos y producidos por el director de cine Mike Dibb (Leeds, 1940).
El escritor británico es conocido a escala global. Por lo tanto, esta exposición es una manera de recordar y profundizar en toda su trayectoria artística. Ahora bien, si no se conoce demasiado su figura, es difícil hacerse una idea tan solo a partir de esta muestra. A medida que avanzas en el recorrido de la exposición, la percepción de cómo podía ser Berger como persona y como artista puede cambiar constantemente. Por una parte, observamos Padre en el lecho de muerte (1976), una obra estremecedora y que encoge el pecho, ya que es un retrato que hizo de su padre al cabo de pocos minutos de morir. Por otra parte, podemos ser espectadores de una conversación entre John Berger y la escritora Susan Sontag (1933 - 2004), donde advertimos importantes diferencias de mentalidad.
De hecho, estos dos escritores, junto con Roland Barthes (1915 - 1980), completan un tríptico expositivo con el cual La Virreina ha abordado a tres autores centrales en la comprensión de los límites éticos e ideológicos de las imágenes durante la segunda mitad del siglo XX. Si en una cosa están de acuerdo Sontag y Berger es que escribir es una responsabilidad, y este tríptico expositivo lo corrobora.