La carrera de Karla Sofía Gascón por el Oscar a mejor actriz, premio que finalmente ganó Mikey Madison por Anora, estuvo marcada por la polémica. Y es que poco después de que se anunciaran las nominaciones resurgieron antiguos tuits de la protagonista de Emilia Pérez de contenido racista, catalanófobo y ofensivo que provocaron una oleada de odio hacia la intérprete, que acabó siendo apartada de la promoción del filme por Netflix. Tras reaparecer en los premios César y acudir después a la gala de los premios de Hollywood —y confirmar que asistirá a los premios de la Unión de Actores este lunes—, en ambos casos sin hacer declaraciones, ahora la actriz española se ha sincerado sobre lo que han sido para ella estas semanas, confesando que el dolor llegó a ser "tan abrumador" que incluso llegó a contemplar "lo impensable".

"Últimamente, he sido el blanco de palabras dañinas, también he dicho cosas hirientes a lo largo de mi vida que han hecho que otros se sientan ofendidos; cosas hechas y dichas desde el miedo, desde mi propia ignorancia, desde mi propio dolor", expresa la actriz en un comunicado recogido por The Hollywood Reporter. "Sin excusa y sin intención de justificar ninguna de mis acciones pasadas, pido disculpas a todos los que he ofendido en algún momento de mi vida y a lo largo de mi trayectoria", prosigue el texto, en el que la intérprete se compromete a "seguir aprendiendo y escuchando, para no cometer los mismos errores en el futuro".

Karla Sofía Gascón / Foto: Europa Press

Además, Gascón recuerda su lucha por "dar visibilidad a un grupo históricamente ignorado", aquel que forma parte de su "identidad" y su propia "realidad", dando vida en Emilia Pérez a "una mujer trans atrapada en el peor lugar posible: el cuerpo de un criminal inmerso en un patriarcado extremo". Según remarca, la cinta transmite un "mensaje de esperanza", y es que "todos podemos ser mejores personas, sin importar nuestro punto de partida o nuestros inicios en esta búsqueda llamada vida". Asimismo, la intérprete asegura que su compromiso con los derechos de los más desfavorecidos sigue siendo fuerte. "Siempre me encontraréis en el lado opuesto al fanatismo, la imposición, el patriarcado, el fascismo, las dictaduras, el terror, el abuso y la irracionalidad. No me aferro a ninguna bandera política, solo intento ser un ser humano en constante evolución, con aciertos y desaciertos, pero con una voluntad inquebrantable de aprender, escuchar, admitir errores, pedir perdón y perdonar a los demás como me perdono a mí misma por el dolor innecesario que he causado", defiende.

Karla Sofía Gascón habla sobre su salud mental

Gascón aprovecha el comunicado también para abrir un debate y una reflexión sinceros sobre la salud mental a raíz de su propia experiencia. "A lo largo de distintas etapas de mi vida, he pasado por momentos oscuros, episodios en los que la desesperación me llevó a lugares inesperados. En este último episodio, el más sonado y expuesto de mi vida, se crearon varias cuentas falsas en mi nombre para aumentar el dolor y la confusión. Se lanzaron contra mí acusaciones absurdas e incluso delirantes, que hirieron profundamente mi espíritu. Las cosas escalaron hasta un punto, y tan rápidamente, que no podía ni respirar", explica.

"En medio de esta tormenta inesperada y devastadora, ha habido momentos en los que el dolor ha sido tan abrumador que he contemplado lo impensable. He albergado pensamientos más oscuros que los que me planteé en algunas de mis luchas anteriores, no menos íntimas y personales. Y me pregunté: si yo, con toda mi fuerza y preparación para lidiar con la rabia y el rechazo, estoy al límite, ¿qué habría sido de alguien con menos recursos emocionales para resistir esta embestida? De alguna manera, lo conseguí. Otros no habrían sobrevivido a este brutal invierno que estoy a punto de concluir", relata Gascón.

Expresando su deseo de que lo peor haya pasado, la intérprete española apunta que la experiencia le ha servido para aprender que "el odio, como el fuego, no puede apagarse con más odio". "Las ofensas no pueden borrarse con más ofensas, y los errores no pueden limpiar otros errores, sobre todo cuando las mentiras y la falsedad proliferan por todas partes y cuando lo único que me devuelven es pura rabia, acoso descarado, vejación, desprecio e incluso amenazas de muerte", señala. "Solo a través de la comprensión, la compasión, el perdón y la empatía podremos construir un mundo en el que la diferencia no sea sinónimo de condena, sino de riqueza. Un mundo en el que podamos aprender y crecer sobre la marcha", concluye el comunicado.