"Ha sido una especie de ascenso meteórico. Todo ha pasado muy rápidamente. Especialmente el año pasado, que estuvimos muy, muy ocupados. Estábamos publicando nuestro álbum debut, Fine Art, y al mismo tiempo, en paralelo, también estaba la película. Nosotros no somos actores, fue nuestra primera experiencia actuando, y lo hacíamos mientras también estábamos de gira y componiendo nuevas canciones. Fue un año muy, muy, muy intenso. Pero todo parecía ir de la mano. De algún modo, la película ha ayudado a la música, y la música ha ayudado a la película. En el vocabulario del gaélico irlandés no existía ninguna palabra para referirse a la cocaína, Kneecap (de quienes ya os avisamos hace unos meses) se la inventaron: “snaois”. Una anécdota que puede parecer menor y poco constructiva, pero que esconde dos realidades. La primera, que el irlandés era desde hacía décadas una lengua en peligro de extinción, que no pisaba el asfalto, usada solo por una pequeña minoría rural de la costa oeste de la isla. La segunda, que esta banda de rap de Belfast ha conseguido, a través de sus rimas en gaélico, corrosivas y subversivas contra todo y todos, que miles de jóvenes se empiecen a interesar por su lengua materna.
🇮🇪 Kneecap, la banda de hip-hop norirlandesa que expulsará a los ingleses de la isla cantante en gaélico
🇮🇪 Fontaines D.C.: "Nos sentimos unos traidores en Irlanda hablando en inglés"
Móglaí Bap y DJ Próvaí se conocieron en un festival de cultura irlandesa organizado por el primero. Móglaí es hijo de uno de los más reconocidos activistas por la lengua gaélica y la cultura irlandesa de Belfast. El segundo, profesor de irlandés en un instituto de la ciudad norirlandesa. Con la incorporación del tercer vértice de esta historia, Mo Chara, amigo de infancia de Móglaí, formaron Kneecap, colectivo de rap que lucha con rimas en gaélico por la reunificación de la isla, pero también radiografían y cartografían, como nadie lo había hecho hasta ahora, el descenso de la juventud norirlandesa a un lado y otro del muro. Su primer sencillo, CEARTA, tuvo el impacto de un camión de la policía unionista en llamas frente a un mural republicano en la pared de un pub de Falls Road. Lo petaron. Boom. En 2024 publicaron su primer LP, Fine Art, un álbum que, con ecos del rap old school al estilo Beastie Boys y del costumbrismo decadente del genial The Streets con préstamos de la cultura rave, contó con la producción de uno de los nombres del momento, Toddla T, y colaboraciones de figuras como Grian Chatten, cantante de Fontaines DC. Ya eran el grupo del momento en Irlanda. Pero su popularidad alcanzó una dimensión global con el estreno de Kneecap, un particular biopic a medio camino entre Trainspotting y No digas nada, que, apadrinado por Michael Fassbender e interpretándose a sí mismos, ganó el premio del público en la pasada edición del Festival de Sundance. ¿Os imagináis a Joel Joan produciendo y coprotagonizando una película sobre la PAWN Gang? "Estuvimos haciendo clases de interpretación durante seis meses. Fue un proceso muy intenso. Luego, el rodaje fueron semanas realmente emocionantes. Cuando ruedas una película, la realidad prácticamente desaparece, te levantas cada mañana y todo se convierte en tu pequeño mundo de mierda. Me encantó, fue puramente terapéutico." La fiesta de final de rodaje, como el propio Próvaí recordaba al diario The Guardian, fue memorable: "Me bebí una botella entera de licor de crema de menta y acabé vomitando en el baño de un pub. Parecía Predator, con todo aquel líquido verde. Qué asco. Cuando levanté la cabeza, vi a Fassbender y a Neil Lennon, el entrenador del Celtic, mirándome desde arriba: ‘Eso le pasa incluso a los mejores’, me dijo Lennon. Uno de los momentos más lamentables de mi vida."

Inmersos en una gira que les ha llevado a actuar en festivales como Reading o Coachella, donde su defensa del pueblo palestino desde el escenario fue criticada por la pijería y los influencers de catálogo de Zara que pululan por la farándula californiana (si saben cómo me pongo pa' qué me invitan), y a pocas semanas de aterrizar en Barcelona para participar en el Primavera Sound, conectamos telemáticamente con DJ Próvaí para hablar de su ascenso meteórico y la importancia de expresarse en tu lengua para, sin estúpidos prejuicios ni complejos anestésicos, mantener vivo el legado de las culturas perseguidas y minorizadas: piensa local, actúa global, canta en tu idioma y cómete el mundo. "Ha sido fantástico poder hacer una gira mundial y llevar el idioma irlandés a lugares donde nunca hubiéramos pensado que llegaría. Durante mucho tiempo, el irlandés para nosotros era solo algo local, un idioma que no hablaba mucha gente. Yo lo aprendí a través del sistema educativo, y Móglaí Bap lo aprendió en casa. Pero no hay muchas familias, en las ciudades y entornos urbanos, que hablen irlandés entre ellas."
¿Dónde se ha mantenido viva la lengua?
Durante miles de años, el idioma se ha mantenido vivo principalmente en la costa oeste de Irlanda, en las zonas Gaeltacht, como Donegal, Connemara, Erris y otros lugares. Vivir todo esto ahora con Kneecap es lo que siempre habíamos esperado que ocurriera, porque cuando éramos pequeños solo teníamos unos pocos referentes en lengua irlandesa. Y ahora que la gente nos toma como referentes... es una especie de bendición. Estamos muy orgullosos. Y queremos... Hay quien dice que si nos lo proponemos, en solo dos o tres generaciones podemos recuperar completamente el idioma o, al menos, darle la oportunidad de ser hablado.
¿Quiénes eran vuestros referentes en lengua irlandesa? ¿Cuándo comenzasteis con el grupo?
Cuando éramos pequeños, sobre todo, escuchábamos música en inglés, música americana y británica. También escuchábamos música más tradicional. Luego empezaron a aparecer bandas como Kíla, que eran algo más rockeras y cantaban en gaélico irlandés. Y también estaban los Bréag, una banda de reggae que tocaba por todo el mundo. Ellos fueron los pioneros en hacer música íntegramente en irlandés. Gracias a que ellos abrieron camino, nosotros tuvimos la oportunidad de hacer lo que hacemos. Hay que decir que Kneecap también llegamos en el momento adecuado, justo cuando las redes sociales comenzaban a despegar, y era más fácil hacer llegar tu música al mundo. Uno de los accidentes felices que surgió de la película fue que siempre habíamos pensado que queríamos llevar el idioma irlandés a la gente de nuestro país, pero ahora se ha convertido en una historia internacional sobre la lucha por las lenguas, las luchas culturales y los pueblos oprimidos que reclaman su patrimonio. Esto es algo que no esperábamos al empezar: que tendría tal resonancia internacional. Es maravilloso ver que pueblos indígenas de México, Nueva Zelanda o Australia nos contactan para decirnos que hemos sido referentes para ellos. Nos dicen que están volviendo a aprender la lengua de sus abuelos, porque muchas de esas lenguas ya se han perdido o están a punto de desaparecer. Solo hacen falta unas cuantas personas con pasión e interés para revitalizarlas y mantenerlas vivas. Con suerte, esas lenguas podrán volver y prosperar como lenguas vivas algún día.
Pero esta es una reflexión que debemos hacer todos los que somos portadores de una cultura minorizada. El catalán lo hablan millones de personas, pero cada día debemos recordarnos que hay que luchar para mantener viva la lengua. Grupos como el vuestro son el ejemplo de que se puede llegar a todo el mundo sin tener que cantar en inglés o castellano.
Uno de los estilos más populares actualmente es el K-pop coreano y la mayoría del mundo no habla coreano. En nuestro caso, nuestros directos se basan en la energía y en transmitir esa energía. Y cualquier lengua es capaz de expresar esa energía, aunque la gente no entienda lo que estás diciendo. Incluso en Irlanda, diría que el 90% del público que nos viene a ver no habla irlandés, probablemente más, tal vez hasta un 95%. Pero el hecho de que seamos capaces de llenar salas por todo el mundo demuestra que cualquier lengua puede hacerlo. Cualquier lengua puede crear esa pasión y esa energía que hace que la gente quiera formar parte de ello. Cantar en irlandés o en catalán no te debe limitar a una audiencia local, puedes llegar a una audiencia mundial.

Cantar en irlandés o en catalán no debe limitarte a una audiencia local, puedes llegar a una audiencia mundial
Liberarte de los prejuicios y creer que cantar en tu idioma puede ser tan interesante y genial como hacerlo en inglés o en castellano.
O incluso más. Porque si lo piensas bien, hacerlo en tu propia lengua añade un extra de autenticidad a tu mensaje que no puedes conseguir cantando en un idioma que no es el tuyo, porque no tienes esa conexión profunda con las emociones. Si eres catalán o irlandés, eso no lo puedes lograr cantando en castellano o en inglés. Hacerlo en tu lengua, contando tus propias experiencias, hablando de dónde vienes y de lo que pasa a tu alrededor, conecta mucho más con la gente de tu entorno. Durante muchos años la gente cantaba con acento americano, y esto se ha hecho durante generaciones. Así funcionaba la música pop y el rock: todo el mundo cantaba con acento americano. Pero ahora la gente ve que tiene mucho más valor ser auténtico, ser uno mismo, ser original. La gente está siendo ella misma y eso es lo que conecta con el público: no la falsedad ni intentar ser alguien que no eres. Cuando empezamos, nuestra intención era llegar a personas como nosotros, que hablaban irlandés, darles referentes, ofrecerles algo con lo que pudieran sentirse identificados. Música que nuestros amigos y familias pudieran escuchar y de la que quisieran sentirse parte. Y eso ha crecido hasta convertirse en algo mucho más grande. Se ha convertido en una historia internacional sobre las lenguas minoritarias y sobre pueblos oprimidos que tienen algo que decir y que contar, historias que no se habían contado porque la historia la escriben los vencedores. Pero ahora la gente tiene la oportunidad de contar su historia real, de compartir su verdadera identidad, sin que esta se vea distorsionada por otra lengua o por un relato ajeno. Ahora la gente puede expresarse en su propia cultura y en su propio idioma.
En vuestro mensaje, sin embargo, no sois dogmáticos; cargáis contra las autoridades unionistas, pero cuando conviene también disparáis contra las republicanas.
Somos irlandeses, en Irlanda del Norte, en una ciudad como Belfast, hijos de un barrio obrero. No tenemos ningún tipo de estima por la autoridad. Nuestra esencia es herencia del lugar del que venimos. Además, siempre hemos dicho que el irlandés es para todos. Hablamos desde ambos lados de la comunidad. Somos clase trabajadora y todos tenemos el mismo tipo de origen y las mismas necesidades y deseos.
El humor más corrosivo es clave en vuestras rimas.
El humor ha sido la forma en que nosotros, nuestras familias y las generaciones antes que nosotros han usado simplemente para sobrevivir y sobreponerse a muchas de las cosas malas que han pasado a lo largo de los siglos. La vida ya es bastante seria, y la sátira ha sido el subterfugio que el arte ha encontrado en Irlanda para combatir al poder. La sátira, en la historia irlandesa, siempre ha tenido un gran poder: existía el rey y después estaba el poeta. Y en la estructura social, el poeta tenía un poder especial: el poder de la sátira. Con un poema podían destruir la reputación de alguien. Por eso la poesía y el arte siempre han sido tan importantes en la cultura irlandesa, porque, por ejemplo, podías avergonzar a un terrateniente por dejar a alguien sin casa, condenándolo a morir de hambre. La gente incluso se dejaba morir frente a las casas de los terratenientes para avergonzarlos. Y eso era más poderoso que atacarlos físicamente. Nosotros, simplemente, estamos continuando esa tradición: satirizar a quienes nos han oprimido durante tanto tiempo. ¡Y parece que funciona! Por ejemplo, tenemos el tema Get Your Brits Out donde usamos el humor contra el DUP (Partido Unionista Democrático). Hablamos de ellos como si saliéramos de fiesta juntos, cuando es gente despreciable que está en contra del colectivo LGTBIQ+ y de la inmigración. Pero poder ponerlos en una escena donde salimos de fiesta, los emborrachamos, los drogamos y nos ponemos a bailar con ellos... eso es mucho más demoledor que atacarlos personalmente. Burlarse de sus posturas es mucho más potente que una crítica directa.

Somos irlandeses, en Irlanda del Norte, en una ciudad como Belfast, hijos de un barrio obrero. No tenemos ningún tipo de estima por la autoridad. Nuestra esencia es herencia del lugar del que venimos
Antes de formar parte de Kneecap eras profesor de irlandés en un instituto. De hecho, te despidieron cuando supieron que eras miembro de Kneecap.
Era un instituto demasiado católico para tener a un profesor miembro de Kneecap.
¿Estás en contacto con algunos de tus antiguos alumnos?
No estoy en contacto directo, pero los veo en los conciertos. Algunos de ellos ahora son profesores de lengua irlandesa, así que el círculo se ha cerrado. Cuando empecé en la escuela, quería que la gente pudiera aprender el idioma y transmitir esa pasión a la siguiente generación. Y estoy muy contento de que eso haya sucedido: quizá cinco o seis de mis antiguos alumnos ahora enseñan irlandés, y lo están transmitiendo a más personas. Y con Kneecap hemos tenido la suerte de poder amplificar aún más ese mensaje y llegar a mucha más gente.
¿Cómo ves el futuro de la lengua irlandesa?
Espero que los jóvenes se sientan mucho más seguros hablando el idioma, que lo usen con sus amigos, fuera de la escuela, de forma natural. Que se sientan cómodos para hacer arte, música, escribir poesía, y que la lengua sea parte vibrante de su vida, no solo una asignatura. Y espero eso para todas las lenguas indígenas y minoritarias. El mundo sería mucho mejor con mucha más variedad cultural que con una sociedad monolingüe de potencias coloniales. Solo hace cuatro generaciones, todo el mundo en Irlanda hablaba irlandés como lengua principal. Eso muestra lo rápido que una lengua puede ser casi exterminada, pero también lo rápido que puede volver. Quizás dentro de dos generaciones, mi hija y su familia hablarán irlandés de manera natural, sin pensarlo.
Espero que los jóvenes se sientan mucho más seguros hablando el idioma, que lo usen con sus amigos, fuera de la escuela, de forma natural. Que se sientan cómodos para hacer arte, música, escribir poesía, y que la lengua sea parte vibrante de su vida, no solo una asignatura. Y espero eso para todas las lenguas indígenas y minoritarias. El mundo sería mucho mejor con mucha más variedad cultural que con una sociedad monolingüe de potencias coloniales
Hace un año que publicasteis Fine Art. ¿En qué estáis trabajando ahora?
Tenemos algunos sencillos que saldrán muy pronto, seguramente ya de cara al verano. También tenemos muchos festivales programados para la temporada, así que estaremos muy ocupados. Estamos trabajando con varios productores y esperamos tener un nuevo disco el próximo año. Por ahora, tenemos unos cuantos sencillos casi listos y después nos centraremos en las giras.
Uno de los festivales en los que actuaréis será el Primavera Sound, vuestra primera visita a Cataluña.
Ya hemos estado en Cataluña antes. Nos habíamos encontrado con algunos de nuestros amigos catalanes allí, y fuimos a algunas de las manifestaciones, será fantástico volver para hacer un concierto. Tenemos muchas ganas. Pero ya estuvimos hacia 2013 o 2014, más o menos. Participamos en algunas manifestaciones por la independencia y la experiencia fue mágica. Probablemente es la manifestación más grande en la que he estado jamás. Fue increíble ver cómo se deben hacer bien las cosas. Fue una experiencia muy inspiradora.
Golpearon a nuestras abuelas y abuelos, ahora estamos un poco desencantados, dormidos.
¡Volveréis a levantaros!