La televisión ha traído el rostro del único condenado por el Prestige 20 años después, uno de los incidentes medioambientales más trágicos de la historia del Estado, de vuelta —al menos por muchos, por primera vez— a las pantallas. Era el equipo de Salvados quien localizaba a Apostolos Mangouras, capitán del Prestige, en un momento en el que, según el periodista y conductor del formato Gonzo, la catastrófica gestión mediática del caso no se aleja demasiado de la actualidad considerando las mentiras de los políticos españoles que se difundieron desde los medios.

Apostolos Mangouras, quien fuera el único encarcelado y declarado responsable del naufragio del petrolero y todas sus consecuencias, había llegado a ser declarado muerto por algunos testigos. Pero el capitán del Prestige está vivo y en Grecia es donde lo ha encontrado el programa de La Sexta, plataforma que ha aprovechado para enviar un importante mensaje a la sociedad y las autoridades españolas tras un silencio más que prolongado.

📣 Gonzo, 20 años después del Prestige: "Apostolos Mangouras quiere hablar pero no lo dejan"
 

El mensaje que el capitán del Prestige envía a la sociedad y las autoridades españolas desde 'Salvados'

20 años han tenido que pasar para ponerle cara a Apostolos Mangouras, el capitán del Prestige que el Salvados de Gonzo ha podido encontrar en la filmación del segundo episodio de este especial por el aniversario de la que podría ser considerada la mayor catástrofe ecológica del Estado y una de las más sonadas en todo el globo con el nacimiento del movimiento ciudadano de protesta Nunca máis. Hasta ahora, poco se sabía del que fuera declarado único culpable de la tragedia que provocó mareas negras en toda la costa gallega, asturiana y parte de Francia el pasado 2002, y es que, aparte de la serie de imperantes negligencias cometidas que dificultaban ya de por sí la situación y trayecto del navío —Salvados ha destapado también la poca profesionalidad de la tripulación y su deplorable estado—, al cabo de la embarcación se le había perdido la pista totalmente y, de hecho, se lo había llegado a declarar muerto.

Apostolos Mangouras en su aparición en 'Salvados'. / Atresmedia

En la isla griega de Icària encontraban Gonzo y su equipo al capitán del Prestige después de todas las dudas sembradas en el primer episodio a pesar de que, de primeras y teniendo en cuenta incluso a los testimonios de algunos residentes de la zona, parecía que sí que había muerto hacía unos años. Sin embargo, con síntomas visibles de una avanzada edad y todavía con el juicio inconcluso, Apostolos Mangouras está vivo y aprovechó su efímera oportunidad de tener voz en pantalla después de tantos rumores infundados sobre su persona y responsabilidad en unos hechos terribles para enviar un mensaje de gratitud a una sociedad española a la que quiere "agradecer a todos los que me ayudaron". Ahora bien, Mangouras sí que admitía molesto y con un tono visiblemente enfadoso que "la sociedad española me trató muy bien, pero las autoridades no". Y es que todavía a estas alturas, el griego arrastra los problemas legales derivados del naufragio.

Apostolos Mangouras, capitán del Prestige 20 años después: declarado único culpable de la catástrofe

Las imágenes de las playas españolas teñidas de negro son prácticamente imborrables. La catástrofe ecológica, así como la conmoción derivada del naufragio del Prestige, sigue todavía viva en la conciencia de buena parte de la sociedad dos décadas después. Se condenaba por ello al capitán Apostolos Mangouras como único responsable de una tragedia de tal magnitud. También en el segundo episodio del especial de Salvados, Daskalakis Themistoklis, el presidente de la Asociación de Capitanes Jubilados de Grecia, salía en defensa de su compañero porque "los hundimientos pasan, pero lo que ocurrió después fue culpa de las autoridades que no hicieron caso del capitán". Cuando Mangouras puso un pie en tierra después del incidente, el griego fue detenido y trasladado a prisión de manera inmediata, sin tener en consideración que se encontraba a miles de kilómetros de su familia.