¡Vuelve a abrir el Museu del Modernisme! Y llega con la exposición titulada Els 4 gats. Bressol del modernisme. Casas, Rusiñol, Utrillo, Romeu… i Picasso. Por el título, bastante largo, por cierto, se intuye que la temática de la exposición es la relación entre Els Quatre Gats y Pablo Picasso (1881 - 1973). Así pues, con palabras de los responsables del museo, se puede decir que se trata de la taberna modernista por excelencia y del artista que se podría considerar el quinto gato.

Mucho más que cuatro gatos

El inicio de la exposición corresponde al título con un texto que da cuatro pinceladas de Els Quatre Gats, una cervecería que funcionaba como punto de encuentro de los creadores modernistas catalanes. Els Quatre Gats​ fueron Ramon Casas (1866 - 1932), Santiago Rusiñol (1861 - 1931), Miquel Utrillo (1862 - 1934) y Pere Romeu (1862 - 1908) que se reflejaban en Le Chat Noir de París, la ciudad referente en el ámbito artístico. El texto introductorio se complementa con una imagen de cada uno de ellos, sumando a un adolescente Pablo Picasso. Una vez vista esta carta de presentación, empieza un discurso bastante disperso.

La muestra reúne esculturas, pinturas, carteles, mobiliario y dibujos que son emblemáticos del modernismo catalán

El recorrido ocupa las dos plantas del museo con casi doscientas obras. Se habla de Els Quatre Gats​, pero también de muchos otros temas y artistas del modernismo que hacían sus aportaciones fuera de este espacio. La muestra reúne esculturas, pinturas, carteles, mobiliario y dibujos que son emblemáticos del modernismo catalán. Algunos ejemplos son: La nena obrera (1889) de Joan Planella Rodríguez (1849 - 1910) o una amplia exhibición de muebles de la Casa Batlló (1904 - 1907) diseñados por el mismo Antoni Gaudí (1852 - 1926). Son obras de gran importancia, pero quedan disueltas entre apartados bastante desvinculados de la temática principal. Este afán de tratar múltiples aspectos del modernismo se acaba convirtiendo en un veneno que marea en el visitante. Toda obra de arte necesita su espacio y su luz para que el espectador pueda disfrutarla y digerirla, lo cual se echa de menos en este caso. Es fácil caer en la saturación por sobredosis de información. Probablemente, una propuesta más concisa funcionaría mejor.

Carta de platos de la cervecería Els Quatre Gats de Pablo Picasso

Els Quatre Gats del título parecen una excusa para visitar los fondos habituales de este museo (magníficos, eso sí). Además, también cuesta encontrar el vínculo entre Picasso y Els Quatre Gats. Se explica que su primera exposición individual en Barcelona fue en este espacio. También se muestran obras del artista malagueño relacionadas con esta cervecería, como el diseño que creó para la cubierta del menú que ofrecían; Carta de plats de la cerveseria Els Quatre Gats (1899- 1900). Pero queda todo disimulado entre muchas otras obras de aquella época. Sin embargo, haciendo justicia (o no), esta exposición consta en la lista de actividades que celebran el quincuagésimo aniversario de la muerte de Pablo Picasso.

Els quatre gats

Cabe decir que el museo da la oportunidad de admirar obras del modernismo de gran importancia y, aunque sea solo por eso, vale la pena ir. Eso sí, hay que asistir con tiempo y la mente relajada. Además, las obras no pueden tener mejor sede que un edificio de Enric Sagnier (1858 - 1931), arquitecto todavía no lo bastante reivindicado del modernismo catalán. La exposición, comisariada por Gabriel Pinós, permanecerá abierta hasta el 14 de julio. El precio de la entrada oscila entre los 8 y los 12 euros.