Se ha muerto Antonio Skármeta, escritor chileno que ganó el premio Planeta 2003, a los 83 años. Así lo ha informado este martes la Universidad de Chile, su alma mater. Fue un referente de la literatura latinoamericana, con obras como El cartero de Neruda (1985) y Baile de la Victoria (2003). La primera fue adaptada al cine (Il Postino, 1994), mientras que la segunda fue reconocida con el Planeta. "Nuestra comunidad universitaria despide con pesar a Antonio Skármeta Vraničić, Premio Nacional de Literatura 2014, egresado de Filosofía y académico de la Universidad de Chile en múltiples etapas de su inspiradora carrera que impulsó la lectura y el amor por los libros", ha anunciado la institución en las redes sociales.

Uno de los primeros en lamentar la muerte y en subrayar su aportación tanto a la literatura chilena como latinoamericana ha sido el presidente chileno, Gabriel Boric, con otro mensaje en las redes sociales. "Gracias, maestro, por la vida vivida. Por los cuentos, las novelas y el teatro. Por el compromiso político. Por el show de los libros que amplió las fronteras de la literatura. Por soñar que la nieva quemaba en el Chile que te dolió tanto", ha expresado.

Nacido en la ciudad septentrional de Antofagasta en noviembre de 1949, Skármeta fue uno de los intelectuales más creativos e influyentes de Chile. Fue un narrador nato con un gran talento para condensar la vida y la filosofía en el interior del cuento, el formato que más quiso. De hecho, se licenció en Filosofía y Educación en la Universidad de Chile y creció como escritor bajo la influencia del pensador español Francisco Soler Grima, discípulo de Julián Marías y de José Ortega y Gasset —también fue un apasionado por el pensamiento del Jean-Paul Sartre, Albert Camus y Martin Heidegger—. En 1963 escribió su primera tesis doctoral, Ortega y Gasset, lenguaje, gesto y silencio, mientras que un año más tarde ganó una beca Fulbright y viajó a la Universidad de Columbia (Nueva York) para escribir una segunda —ahora, sobre la narrativa de Julio Cortázar.

La fama le llegó por sus novelas y la adaptación al cine de alguna de ellas. Es el caso de Ardiente Paciencia, que primero fue una película homónima en 1983 antes de publicarse en 1985. De este libro salió una segunda adaptación en 1994, bajo el título El cartero de Neruda (o Il Postino), que tuvo tanto éxito que obligó a reeditar la novela con un nuevo título.

Antonio Skármeta y el exilio

Fue un intelectual de izquierdas, miembro del Movimiento de Acción Popular y Unitaria en los años del gobierno del Frente Popular y el presidente socialista, Salvador Allende. Es por esto que se vio obligado a abandonar Chile tras el golpe de estado militar liderado por el general Augusto Pinochet en 1973, que inició una de las dictaduras más sangrientas de Latinoamérica. Tras pasar por Argentina y otros países, en 1981 se estableció en Alemania, donde bastió la historia de El cartero de Neruda: primero, para la radio alemana; después, como un guion. La obra obtuvo un éxito enorme que lo catapultó a la fama: fue traducida a más de treinta lenguas, adaptada al cine, al teatro, a la ópera y a la radio. Según el autor, "existen más de cien versiones en el planeta".

Volvió a Chile en 1989, el mismo año que acabó la dictadura, y continuó su vida como profesor universitario, académico y diplomático. El 7 de septiembre de 2015 fue elegido miembro de número de la Academia Chilena de la Lengua para ocupar la butaca 20, vacante desde la muerte de Óscar Pinochet de la Barra. Vio como otros de sus títulos fueron adaptados a la gran pantalla: en 2009, Fernando Trueba adaptó Baile de la Victoria; en 2012, Pablo Larraín adaptó El plebiscito en la película No; y en 2017, el cineasta brasileño adaptó Un padre de familia en La película de mi vida.

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