La reconocida actriz británica Maggie Smith, conocida por sus papeles en las películas de Harry Potter y la serie Downton Abbey, ha muerto a los 89 años, según ha informado su familia. A través de un comunicado, sus hijos Toby Stephens y Chris Larkin han dicho: "Es con mucha tristeza que tenemos que anunciar la muerte de Dame Maggie Smith. Murió tranquilamente en el hospital de esta mañana, el viernes 27 de septiembre. Una persona intensamente privada, al final estuvo con los amigos y la familia. Deja a dos hijos y cinco nietos que se ven devastados por la pérdida de su extraordinaria madre y abuela." Smith deja un legado artístico de más de 70 años en teatro, cine y televisión, por el que recibió decenas de reconocimientos, incluido el nombramiento como "dama" por parte de la reina Isabel II en 1990, en agradecimiento a su contribución a la cultura del país.
Las reacciones a su muerte no se han hecho esperar. El primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, definió a Smith como un "tesoro nacional" y alabó su legado artístico, que aseguró que perdurará durante generaciones. El actor Hugh Bonneville, que compartió pantalla con Smith en Downton Abbey, le ha recordado como una "leyenda de su generación". "Cualquiera que compartiera una escena con Maggie dará fe de su aguda mirada, su agudo ingenio y su talento formidable", ha dicho en declaraciones a la BBC. El actor Ruper Grint, que da vida a Ron Weasley en la saga Harry Potter, no ha publicado ningún mensaje, pero ha tenido un pequeño tributo hacia Smith cambiando la fotografía de su perfil de Instagram por una donde sale acompañado de ella .
Un legado de más de 70 años en escenarios y cines
La severidad de la profesora Minerva McGonagall hacia Harry Potter y sus amigos en la escuela Hogwarts y la sarcástica condesa viuda Violet Crawley en Downton Abbey, la convirtieron en una figura reconocida mundialmente, pero Smith empezó su carrera en la década de 1950 en el teatro Oxford Playhouse, y con 22 años hizo su debut en Broadway con New Faces. Smith actuó en múltiples obras de teatro a lo largo de las siguientes décadas, en las que trabajó para dos grandes compañías de renombre como son la National Theatre Company y la Royal Shakespeare Company, y se estableció como una de las más destacadas actrices de teatro junto a Judi Dench. Su última aparición en los escenarios fue en 2019, cuando interpretó el monólogo de la obra a German Life en el Teatro Bridge de Londres.
Con su primer papel destacado en una película, en 1958, en el thriller Nowhere to Go, recibió la primera nominación a un Premio BAFTA como mejor actriz de reparto. Su prolífica carrera en la pantalla grande se extendió durante décadas, habiendo actuado casi hasta el último momento, y le mereció decenas de reconocimientos. Sus papeles de cine más galardonados fueron como Jean Brodie en Los mejores años de Miss Brodie (1969), por el que ganó el primer Oscar y el primer BAFTA; como Diana Barrie en la comedia California Suite (1978), con el que se llevó su primer Globo de Oro y el segundo Oscar; y como Charlotte Bartlett en la película Una habitación con vista (1985) que también le hizo ganar un Globo de Oro y un BAFTA.
Con todo, a lo largo de su carrera estuvo nominada 18 veces a los premios de cine británico, que también se llevó por A Private Function (1985), The Lonely Passion of Judith Hearne (1989) y Tea with Mussolini (2000), además de recibir dos premios honoríficos. En los Oscar también recibió otras cuatro nominaciones por las cintas Otelo (1965) Viajes con mi tía (1972), Una habitación con vista (1986) y Gosford Park (2001). Durante los años 2010, Downton Abbey también la convirtió año tras año en candidata a Emmy, que ganó tres veces, ya los Premios del Sindicato de Actores (SAG), que se llevó en cuatro ocasiones. Sin embargo, el máximo reconocimiento en el Reino Unido se lo otorgó en 1990 la reina Isabel II, cuando la nombró "dama" por su contribución a la cultura británica.