El director de cine canadiense Norman Jewison ha muerto a los 97 años de edad en su residencia de Los Ángeles, según ha informado The Hollywood reporter. El fallecimiento se habría producido el pasado sábado en su residencia, aunque la noticia se ha hecho pública esta semana después que su publicista, Jeff Sanderson, emitiera un comunicado. El cineasta es conocido por películas como Hechizo de luna, En el calor de la noche o Jesuscristo Superstar, así como el musical El violinista en el tejado. Sus largometrajes ganaron múltiples premios de la Academia, por las que Jewison recibió un Oscar a la trayectoria en 1999. Además, En el calor de la noche (In the Heat of the Night), protagonizada por Sidney Poitier y Rod Steiger, ganó la estatuilla de Hollywood a la mejor película en 1967.

Jewison (Toronto, 1926) se graduó en la Universidad de Toronto, y tras de servir en la Armada durante la Segunda Guerra Mundial, en la primera parte de la década de los 50 se embarcó en un viaje por el sur de los Estados Unidos, donde se sensibilizó con la desigualdad y el racismo imperante en esas zonas. Tanto fue así que esta experiencia siempre ha formado parte del leitmotiv de la filmografía del realizador. Su debut como director fue con Soltero en apuros, al que siguieron títulos como No me mandes flores (1964), The Art of Love (1965) o El rey del juego (1965). Pero su primer éxito llegó con En el calor de la noche en 1967, una película a medio camino entre el thriller policíaco y el cine de denuncia protagonizada por Sidney Poitier y Rod Steiger, y cuya trama se centra en el racismo estructural. 

A principios de los años 70 llegó su otro gran éxito. Con El violinista en el tejado, Jewison se atrevió a retratar la vida de un pueblo judío en Ucrania, en plena época zarista, a modo de musical y con un excelente sentido del humor. También durante esta década dirigió largometrajes como la futurista Rollerball (1975), la comprometida Justicia para todos (1979) o el gran musical de influencia hippie Jesucristo Superstar (1973),  protagonizado por Ted Neeley, Carl Anderson o Yvonne Elliman y que se consagró en el imaginario colectivo de la época, así como de las generaciones futuras. La carrera de Jewison también atesora títulos como El caso de Thomas Crown, Hechizo de luna (1987), que le valió a Cher su primer Oscar, o Huracán Carter (1999) con Denzel Washington al frente. Su última película fue La sentencia, estrenada en 2003.

Pese a que Jewison fue nominado numerosas ocasiones en la categoría de mejor director en los galardones más importantes del cine mundial, jamás consiguió llevarse una estatuilla. En total, compitió en la candidatura de mejor película en cuatro ocasiones, mientras que como mejor director lo hizo tres. No obstante, en 1998 fue galardonado por toda su trayectoria con el Premio en memoria de Irving Thalberg, galardón que concede la Academia durante la ceremonia de los Premios Oscar y que consiste en un pequeño busto del mismo Irving Thalberg. Además, ya en 2004, Norman Jewison publicó su autobiografía, titulada This Terrible Business Has Been Good to Me.