La poeta Louise Glück, ganadora del Premio Nobel de Literatura 2020, ha muerto a 80 años. La defunción ha sido confirmada este viernes a Associated Press por Jonathan Galassi, su editor en Farrar, Straus & Giroux. Ha sido por cáncer en su casa, en Cambridge (Massachusetts). Fue la primera poeta norteamericana a recibir el Nobel desde T.S. Eliot en 1948, "por su característica voz poética, que con su austera belleza hace universal la existencia individual" durante su trayectoria de más de 60 años.
Sus poemas eran breves, de una página o menos. Influida por William Shakespeare, la mitología griega y T.S. Eliot, cuestionó y descartó los vínculos del amor y el sexo. Esta es la premisa de Mock Orange (naranja falsa) y Summer (verano), dos de sus poemas más famosos. Glück publicó más de una decena de libros de poesía, junto con ensayos y una breve fábula en prosa. Todo le inspiraba: desde los tejidos de Penélope en la Odisea hasta el complejo deportivo Meadowlands, en Nueva Jersey.
Glück y el Pulitzer de poesía
El año 1993, Glück ganó el premio Pulitzer de poesía por The Wild Iris (el iris salvaje) —que incluye un intercambio entre un jardinero asediado y una deidad insensible. Otros títulos son The Seven Ages (las siete edades), The Triumph of Achilles (la victoria de Aquiles), Vita Nova y una antología muy aclamada, Poems 1962-2012. También ganó el premio Bollingen en 2001 por su trayectoria y el Premio Nacional del Libro en el 2014 por Noche fiel y virtuosa. Fue poeta galardonada en Estados Unidos en 2003-2004 y recibió la Medalla Nacional de Humanidades en el 2015 por sus "décadas de poderosa poesía lírica que desafía todos los intentos de etiquetarla definitivamente".
Más allá de lo que habíamos dicho sobre el amor y el sexo, se la ha descrito a menudo como una poeta autobiográfica. Su trabajo es conocido por su intensidad emocional y para recurrir con frecuencia a la mitología o imágenes de la naturaleza para meditar sobre experiencias personales y la vida moderna. Temáticamente, sus poemas han tratado aspectos como el trauma y el deseo —con sus francas expresiones de tristeza y aislamiento. Los jueces del Nobel elogiaron "su característica voz poética, que con su austera belleza hace universal la existencia individual".