Gràcia acoge la exposición Un mundo de mil demonios, que en el marco del festival Tradicionàrius explora la tradición demoniera en Mallorca y en el mundo. Y lo hace mediante fotografías de la tradición de los dimonis en Mallorca, pero también explorando otras tradiciones de demonios por todo el mundo. Y es que el individuo de los cuernos es mucho más popular de lo que podíamos imaginar: desde Japón hasta Perú, pasando por Finlandia, el Mediterráneo, Países Bajos... Este es un proyecto de la Casa Guinard, Museu de la Paraula, de Sant Joan, en Mallorca. Esta exposición se podrá ver hasta el 24 de febrero al Centre de Cultura Popular La Violeta, el Orfeó Gracienc y el Centre Artesà Tradicionàrius.

Fiestas de Sant Honorat (Algaida, Mallorca) autor José Juan Luna "Potti".

Mallorca fuera de serie

La  Violeta acoge la parte de la exposición centada en Mallorca, con grandes fotografías de "Potti" y con textos e imágines históricas sobre la tradición. Los diablos mallorquines son diferentes de los catalanes, pero la tradición demoniera también es muy fuerte en esta isla, donde encontramos ritos con diablos en Manacor, Montuïri, Felanitx, Lloret, Sineu, Sòller, Inca... A veces los demonios aparecían como contrapunto a la figura de algún santo, y a menudo van acompañados de "diablillos". Estos rituales se suelen celebrar por San Antonio Abad", pero también en verano, durante las fiestas mayores. Esta tradición, muy viva hasta antes de la guerra civil, se recuperó, sobre todo, después de la muerte de Franco y ahora está en pleno vigor. El demonio es la mascota del principal equipo de la isla, el RCD Mallorca.

El verdadero terror

Los diablos de Mallorca tradicionalmente no solían ir en grupos muy numerosos (en algunos pueblos está documentado que salían cuatro). Pero su potencial aterrador era muy grande porque habitualmente van cubiertos de unas terribles máscaras que le dan un aspecto imponente (hay quien los asocia al dios griego Pan, el patrón de los pastores, por sus cuernos de cabra). Pero a partir de los años 1990 se han creado también grupos de "demonios de fuego" que mezclan tradición local, baile de diablos y correfoc. Los diablos mallorquines resultan terriblemente imaginativos, con vestuarios diversos y con acciones sorprendentes (los de Inca, por ejemplo, llegan a ir en bicicletas modificadas, llenas de artificios pirotécnicos por todas partes, con un aire de motocicletas de Mad Max). La tradición establece que en algunos pueblos los diablos acosan al público para repartir golpes o bastonazos. Hay motivos para escapar de ellos.

Namahage. (Ashizawa, Oga, prefectura de Akita) autor Charles Fréger, serie Yokainoshima

Fréger en la raíz de los diablos

Si las fotografías de Potti tenían la ventaja de mostrarnos a los diablos en pleno ritual, las de Charles Fréger, expuestas en el Tradicionàrius, tienen la intención contraria. Nos muestran a hombres disfrazados de seres monstruosos, a cualquier parte de Europa (en la serie Wilder Maan) o de Japón (en la serie Yokainoshima). En todas partes, con máscaras peculiares, cubiertos de pieles o de paja y con instrumentos terroríficos, hombres disfrazados de monstruos (o de diablos) participan en rituales como representación del mal. Pero Fréger no nos les retrata durante la fiesta, sino solitarios, y nos permite apreciar al máximo la belleza del diseño del disfraz, de la capacidad aterradora de la máscara, de la transmutación absoluta del portador del disfraz.

El imaginario desbordante de la humanidad

Los personajes que retrata Fréger son fascinantes, sobre todo, porque son representaciones monstruosas de carácter muy diferentes. En Suiza los Tschäggattä se dedican a aterrorizar a la gente, usando máscaras anteriormente usadas por los bandoleros. En Macedonia, durante el Carnaval, los mechkari se tapan con una máscara, se cubren de pieles y bailan hasta reventar (en cambio en Alemania sacan a pasear el Strohmann, un ser esperpéntico con un traje hecho de paja y ramas de abeto). En Austria es el 5 de diciembre, festividad de San Nicolás, cuando salen Lucifer y los demonios a las calles. I Fréger sabe sacar de ellos el máximo partido, como también a los seres fantásticos de Japón, criaturas que podríamos definir como espectros, monstruos u ogros, y que nos permiten vislumbrar cómo el manga, máxima expresión de modernidad, se inspira directamente en la cultura popular japonesa.

Tschäggattä (Lotschental, cantón de Valais, Suiza) autor Charles Fréger, serie "Wilder Mann"

Mapa demoniero en el Orfeó

El Orfeó Gracienc presenta el "Mapamundi endemoniado" de Melicotó, integrado por tres mapas que nos sitúan las tradiciones demonieras de los Països Catalans, de Europa y del mundo entero. Una demostración del arraigo de estas prácticas populares, y de la fascinación que la fealdad, el mal y el horror sigue provocando en humanos de todas las culturas. Se acompaña de un conjunto de fotografías de Friso Spoelstra sobre los rituales festivos en Europa, producto de un trabajo de 10 años fotografiando los rituales populares de 16 países europeos.

Su Battileddu (Lula, Cerdeña, Italia). Foto: Friso Spoelstra, serie "Devils & Angels".

Demasiado poco, en demasiados espacios

La exposición de La Violeta combina imágenes recientes, de los diablos actuales, de José Juan Luna "Potti", con fotografías procedentes de archivos etnográficos y textos del padre Guinard, el gran etnógrafo que documentó esta tradición. Las imágenes de Potti, de una calidad excelente, permiten captar la diversidad de esta tradición, pero además nos permite ver a los diablos en plena acción. El vestíbulo del Centro Artesà Tradicionàrius sorprende, con las potentes fotografías de Fréger. Y el Mapamundi del Orfeón aporta información muy interesante. Pero la pequeñez de los tres espacios expositivos ha obligado a hacer una elección de materiales que ha hecho perder la riqueza que habrían podido tener las colecciones de Fréger, por ejemplo. Al visitante le gustaría ver más. Además, las imágenes están poco contextualizadas, y el visitante no tiene forma de encontrar información suplementaria (unos códigos QR, por ejemplo, podrían resolver la situación). Habría valido la pena dar más relieve a esta iniciativa, que ofrece materiales de gran calidad, porque los demonios siguen fascinando. Alguna cosa tendrán...

 

Fotos de portada: Fiestas de Sant Antoni (Capdepera, Mallorca). Autor: José Juan Luna "Potti".