"Y may run and hide, When you're screamin' my name, alright," ha sonado rompiéndolo todo a las ocho y media de este lunes en la Sala Apolo de Barcelona. Nick Carter ha roto el escenario y se ha puesto al público en el bolsillo con un hit de su época en los Backstreet Boys. La Sala Apolo se ha quedado pequeña con el estribillo de Larger Than Life: "All you people can't you see, can't you see, How your love's affecting our reality, Every time we're down, You can make it right, And that makes you larger than life". La locura no se ha hecho esperar. Gritos, silbidos y todos los móviles del público grabando los primeros pasos de Carter en Barcelona. Antes de saltar a otro clásico del tour Who I Am, ha sonado Everybody Wants to Rule the World. El público tenía ganas de juerga y Carter ha cantado a todo trapo Get Over Me.

Dicen que si vas revuelto a un concierto, sales peor. Y es que todo es un revival de la adolescencia de la mayoría del público. Fuera por las canciones de Nick Carter y los primeros pasos en solitario o como el rompecorazones de una boy band, es difícil no sentir nada con la melodía y los temas tocados. Entre gritos de 'guapo' y de adolescentes mayorcitas y enloquecidas viendo su ídolo —como quien escribe estas líneas—, Carter ha seguido con Don't You (Forget About Me). Y ha sido entonces que se ha producido el momento esperado. "¡Hola, Barcelona! ¿Cómo estáis?". El cantante ha dado la bienvenida a su show y ha adelantado que explicaría una historia, la suya y que tocaría "canciones de los Backstreet Boys, mías y algunos temas nuevos que quizás no conocéis". Siempre en castellano, Carter ha dado las gracias al público y ha dicho que nunca había estado en un sitio como este. Unas palabras que han dado paso en el I Got You, acompañados de gritos y más nervios para ver a quién levantaba más la voz.

Un retorno al pasado

Carter ha explicado que los "31 años encima del escenario han ido acompañados de subidas y bajadas". Y ha sido entonces que el cantante ha aprovechado para hacer un mashup de Shape of my Heart e I Need You Tonight. Con versos que sacuden, claro está: "Open up your heart to me, And say what's on your mind, oh yes, I know that we have been through so much pain, But I still need you in my life this time". La mítica Do I Have to Cry for You también se ha asomado. Ha sido después de que Carter ha confesado haber vivido unos años complicados. No ha hecho mención, pero cabe recordar que ha perdido a sus tres hermanos en menos de 10 años. Turno para Superman y Help me. No podía faltar otra canción mítica de cuando formaba parte de los BSB: Quit Playing Games (With My Heart). Cancioncilla pegadiza que dice literalmente "deja de jugar con mi corazón".

Después de esta canción, Nick Carter ha querido engañar al público haciendo ver que ya se había acabado todo. Pero nadie se rendía. Gritos y peticiones para que el artista volviera a salir y cantara algo más. El fanatismo se ha vuelto a apoderar de la pista cuando, después de cambiarse de ropa —lo ha hecho hasta cuatro veces— ha salido para cantar I Want It That Way y Everybody. El éxtasis del público ha sido loco. Los móviles sacaban fuego de la cantidad de trabajo que tenían. Y la emoción era tanta que muchos de los fans lo han querido compartir con videollamadas (algunos lo han hecho durante todo el concierto y otros con los hits más potentes).

Carter se ha despedido. Dice que nos lleva al corazón. De repente se han abierto las luces. Nos miramos entre el público. Caras sonrientes, alegría máxima. Por un rato, todos hemos vuelto a nuestro yo adolescente. El de cantar en pleno pulmón las canciones de los cantantes preferidos y forrarse la habitación con los pósteres de los ídolos —paredes, carpetas o archivadores, cualquier superficie era válida—. Las experiencias del yo adolescente se mezclan con las de persona adulta. Con las emociones revueltísimas y pensamientos dando vueltas, imitando el movimiento de una lavadora cuando centrifuga, nos marchamos. Una mochila llena de amores, desamores, palabras llenas de significado y una nostalgia que abraza. Ya lo dicen que no puedes hacer un viaje al pasado y no salir ileso. Pero cómo cuando bajas de una montaña rusa, siempre puedes hacerlo con una sonrisa (o con una lágrima).