El cuadro titulado Pintura, que Joan Miró pintó entre 1925 y 1925, una obra característica de su periodo surrealista, que muestra un fondo azul cobalto con las características figuras geométricas universales del artista catalán, esconde un secreto que han descubierto los investigadores de la Fundación Miró: un retrato de Dolors Ferrà Oromí, la madre de la artista, que quedó oculta bajo las pinceladas de Miró. El descubrimiento se ha hecho gracias a un estudio científico-técnico que se ha realizado con tecnología o invasiva innovadora, que ha permitido obtener una imagen del retrato subyacente e identificarlo como la madre de Miró. El estudio ha permitido concluir que cuando Miró elaboró Pintura, utilizó como soporte un lienzo con un retrato pintado por otro artista. Por la semejanza con otro retrato que se encuentra en Son Boter, tanto en el ámbito estilístico como técnico, este retrato podría haber sido pintado por Cristòfol Montserrat Jorba (Vilanova i la Geltrú, 1869 – Barcelona, 1935). Todo el proceso de investigación se podrá seguir a través del documental El secreto de Miró, y también en la exposición Bajo las capas de Miró, que se podrá ver hasta el 29 de junio.
Las motivaciones de Miró
Miró pintó el pequeño cuadro en óleo sobre tela que regaló a su gran amigo, el promotor del arte Joan Prats, que la conservó en su casa hasta el año 1975. Cuando este murió, la obra pasó a formar parte de la colección de la Fundació Joan Miró. El tiempo, y la humedad, no habían sido amables con la tela, que había sufrido microfisuras y otros daños. En un informe de 1978 ya se describía el mal estado de conservación de la obra, y una radiografía ya revelaba la presencia de un retrato subyacente, que no se había podido identificar. No es extraño que los artistas reutilicen pinturas de otros pintores, y de hecho, Miró ya había pintado encima de otros retratos entre los años 40 y 50, y entre los 60 y los 70 lo hizo encima de paisajes. Pero según Marko Daniel, director de la fundación, Miró habría recortado y reutilizado el lienzo para crear este cuadro azul brillante como un acto de rebelión contra los valores burgueses que representaba su familia, aunque conservando la cara de su madre como gesto de respeto. "No fue un acto juvenil de rebelión, sino contra el mundo que sus padres representaban", sostiene a Daniel.
Hace un año, los expertos de la Fundación, liderados por Elisabet Serrat, su responsable de conservación preventiva y restauración, decidieron investigar Pintura utilizando técnicas de imagen que utilizan varios rangos de radicación electromagnética, como son la fotografía con luz visible rasante y transmitida, luz ultravioleta y luz infrarroja, la radiografía y la imagen hiperespectral. El equipo de Serrat e investigadores de entidades, entre los cuales el Centro de Restauración de Bienes Muebles de Catalunya y la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, descubrieron el retrato de una mujer de mediana edad bien vestida, pintado con un estilo que no podía ser más diferente del de Miró, según explica The Guardian, el diario británico que ha avanzado el hallazgo. "Ahora teníamos una imagen de buena calidad del retrato, que parecía casi una foto, pero no sabíamos de quién era", explica Serrat al diario británico.
El equipo inició la investigación con el fin de encontrar la identidad de la persona retratada, que los llevó hasta Mallorca, donde también vivió Miró. En el estudio Son Boter de Miró, en la isla Balear, Serrat encontró un retrato de 1907 firmado por el artista Cristòfol Montserrat Jorba. La cara no solo coincidía con la de la mujer de Pintura, sino que su tema era Dolors Ferrà i Oromí, más conocida como la madre de Miró, según explica a The Guardian. "El (retrato de Mallorca) es exactamente lo mismo, salvo algunas diferencias: el vestido era diferente y los pendientes eran diferentes, pero no hay duda que es la misma cara", dice Serrat. "Estos descubrimientos son rarísimos. Descubrir la cara de Dolors Ferrà fue una sorpresa deliciosa".
Documental y exposición sobre el descubrimiento
El proceso de investigación ha sido filmado y se ha producido el documental El secret de Miró, dirigido por Lluís Jené. El trabajo profundiza en este enigma y explora las posibles razones que llevó Miró a ocultar la imagen de su madre. La producción se estrena este jueves en la plataforma CaixaForum+ y en los canales de la fundación. Con respecto a la exposición Bajo las capas de Miró, se podrá ver hasta el 29 de junio. Pretende compartir este descubrimiento con el mundo. La muestra explica el proceso de investigación e investigación, cuenta con el Retrato de Dolors Ferrà y Oromí de Cristòfol Montserrat, dibujos preparatorios que realizó Miró entre 1924 y 1926, así como anotaciones y detalles de las imágenes obtenidas por fotografía infrarroja y otras técnicas innovadoras.