Son días de aislamiento y, en algunos casos, también de introspección, estado que puede ser propicio para aquellos creadores que tienden a mirar hacia adentro, más partidarios de encontrar en sus yo y los alrededores inmediatos aquellas cosas que pueden compartir con los otros. Como los poetas. Los escritores tienen que escribir y los lectores tienen que leer, con la misma proximidad, si puede ser, que la del campesino y el consumidor. Y para que eso pase, ahora y aquí, La Llança, suplemento cultural de El Nacional, ha propuesto a una treintena de poetas de una calidad indiscutible y con una trayectoria detrás que nos hagan llegar un poema recién recogido. Así pues durante un mes publicaremos cada día un poema, cada uno de un poeta diferente, sin más requisitos ni condiciones que estos que hemos mencionado. Porque vivimos como vivimos y también porque se lo hemos pedido sin margen de tiempo, tendremos durante treinta días "Poetas bajo presión".

Hoy es el turno del escritor y periodista Valentí Puig (Palma, 1949), Premio Nacional de Cultura 2018.

 

LA GAVARRA D’EUROPA 

 

Els grans rius d’Europa, entre castells i boscos

generosos. La cornisa escalabrada d’un palau

fet a la mida de Gilles de Rais. Corbes lentes

de cant gregorià. Els cardenals que foren cruels

i tenien vassalls. Tardes curtes de cel coral·lí, 

sense més plàncton que la memòria. Paguem

amb euros. Ara tanquem i reobrim Schengen. 

Floracions, podridures i rebrots. Terra de “foie”. 

L’aigua clapoteja a les pedres negres de la resclosa.

Una gavarra es gronxa amb bandera pirata. El ca

lladra a proa. Som a trenta passes de la frontera 

entre dos imperis enemics que avui mercadegen

a Brussel·les. Insignes brigades de cavalleria

violaren les dones del país veí, al segle dinou.

Comtats que avui són federacions histriòniques, 

mort de la metàfora, visites a Auschwitz “low cost”. 

La nina estén roba al cabrestant de la gavarra xata.

Guardes fronterers surten d’un paràgraf de Simenon.

Dones santes consideren el xup-xup del “pot-au-feu”