En Catalunya hay más de cuatro docenas de pueblos con un topónimo que empieza con el prefijo "vila-". A menudo, imaginamos que este prefijo denota que el origen del pueblo está relacionado con una residencia elitista. Pero nada más lejos de la realidad. Este prefijo nos indica su origen, pero no tiene ninguna relación con las lujosas casas de los siglos XVIII y XIX, sino que nos explica una serie de fenómenos que se produjeron durante los siglos VIII a XI, durante la etapa de formación y primera expansión de la nación catalana. Pero, ¿qué nos dice, exactamente, el prefijo "vila-" delante del topónimo de un pueblo?