Por segundo año consecutivo, el Salón del Cómic ha decidido incluir un espacio reservado únicamente para los más pequeños, el Comic Kids. Este espacio responde a la diversificación creciente del público que asiste al Salón: si antes era mayoritariamente gente joven, actualmente los públicos son mucho más variados. Los organizadores seguran que cualquier visitante, sea como sea, puede encontrar en el salón una actividad, un álbum o un objeto que sea de su gusto. Y eso también incluye a los niños.
El Comic Kids tiene una doble función: por una parte facilita las visitas familiares, al proporcionar entretenimientos del gusto de los más pequeños, que complementan a los de los jóvenes y adultos, pero también permite que los niños empiecen a introducirse en el mundo del cómic, con la esperanza de convertirlos en los lectores del mañana.
Esta sección, obviamente, incluye una "comicteca", donde los niños pueden escoger qué leer entre los cómics adaptados a su edad. También es el espacio donde se realizan los talleres, donde se aprenden los rudimentos de la animación. Y también tiene espacios para actividades mucho más lúdicas, como un apartado donde pintarse las caras o un photocall con muñecos gigantes de Playmobil. El Salón del Cómic quiere ser, también un Salón para niños.