La revista Sàpiens, en el número especial del 11 de septiembre, publica una investigación de la historiadora Maria Rosa Pigrau, que ha estudiado la correspondencia inédita entre Felipe V y su abuelo, el rey francés Luis XIV, en que hablan de la guerra de Sucesión. Agustí Alcoberro considera que estas cartas tienen "un valor excepcional" al poner de manifiesto la visión del conflicto que tenían el monarca francés y el español. Este ejemplar de Sàpiens, con transcripciones de las cartas entre monarcas, ya está a la venta.
Uno de los elementos más relevantes de esta documentación es la contundencia del monarca hacia los catalanes. Felipe V se expresaba con contundencia en la correspondencia con su abuelo, dejando claro que su objetivo era aplastar a los barceloneses, que en aquel momento ya estaban bajo asedio: "Una vez la trinchera abierta, abrir fuego a discreción, sin condiciones. Y si llevan su perfidia y su obstinación, hasta dejarse asaltar, someterles con el máximo rigor". Todo el mundo sabe cómo acabó la historia.
La posición de su abuelo, en cambio, eran mucho más moderada y en varias ocasiones pidió clemencia para los catalanes: "Las bombas que haréis caer en Barcelona matarán tanto a aquellos que os son fieles como a los sediciosos. [...] Os tengo que confesar que esperaba que seríais sensibles a la ruina, absoluta, de una villa importante, y a la pérdida de mucha gente valiente, que haréis morir para castigar a los rebeldes," advertía Luis XIV.
Luis XIV y Felipe V mantuvieron una fluida correspondencia de 1701 hasta 1715, en unos años en que el rey de Francia, el Rey Sol, era el principal monarca europeo. Maria Rosa Pigrau ha sacado a la luz más de 3.000 cartas, lo que constituye un fondo documental de gran importancia y fiabilidad que permite estudiar en 1714 desde una nueva perspectiva.