Casi una treintena de mujeres han secundado las acusaciones de la fotógrafa y directora Silvia Grav y han acusado a Eduard Cortés, director de Merlí, de haberlas acosado sexualmente. En concreto, lo acusan de haber propuesto que se grabaran desnudas, masturbándose o haciendo prácticas sexuales a cambio de papeles. Así lo publica el diario El País, que explica que estos contactos se establecían a través de las redes sociales desde hace, al menos, una década, mientras entonces las destinatarias de los mensajes de Cortés tenían entre 20 y 30 años, y dos de ellas siendo menores en aquel momento.
Algunas de las víctimas ya habrían recurrido al servicio de atención de la Acadèmia del Cinema Català, aunque se desconoce la cifra y el nombre debido a la confidencialidad. La Acadèmia ya abrió un procedimiento sancionador hacia el director de cine cuando conoció que estaba acusado de acoso sexual. Siguiendo el reglamento de la entidad, se constituyó una comisión experta formada por una jurista y una psicóloga especializadas en violencias sexuales. No obstante, el expediente ha quedado en suspensión porque el cineasta solicitó la baja de la Academia el pasado 25 de noviembre, que fue admitida, así que a partir de ahora el caso solo se reabriría si el acusado volviera a pedir el alta. Asimismo, la entidad catalana recuerda a través de la red social X qué Cortés "no será invitado ni es bienvenido" a ninguno de los actos de la Academia.
Todo empezó cuando la fotógrafa y directora Silvia Grav acusó el octubre pasado al director de La vida de nadie y Ni una más de haberla acosado a través de las redes durante años. "Este señor se pasó años haciéndome grooming (acoso sexual a menores) cuando yo tenía 19 años y él 55 (todavía tengo las conversaciones), prometiéndome ayudarme profesionalmente, y aquí sigue dirigiendo películas y series en España", escribió en su cuenta de Instagram. "Tuve un poco de intuición y nunca quedé en persona, aunque insistió. Estoy 1000% segura que no soy la única, cuatro años intentando aproximaciones sexuales continuas son un patrón, no un caso aislado", escribió Grav en las redes, y animó a todo el mundo que haya pasado por lo mismo a escribirla.
A partir de aquí, Grav recogió los mensajes de otras mujeres que habrían pasado por situaciones similares y varias actrices españolas también acusaron a Cortés por sus comportamientos. La directora detalló qué Cortés se acercó a ella a través de una cuenta de Facebook, que ya está eliminada. "Borró la cuenta de Facebook desde la que hacía este tipo de avances, probablemente viéndolas venir. Su perfil era Gato Del Cerro". Casualmente, una de las últimas producciones de Cortés con más popularidad fue la miniserie de Netflix Ni una más, donde se trataban las agresiones sexuales contra las mujeres.