Las clásicas revistas de viajes solían ir acompañadas de fotografías de postal, que intentaban reflejar, sobre todo, la magnificencia de los paisajes. La imagen, muy a menudo, vale más que mil palabras. Pero si la fotografía es ideal para reflejar la espectacularidad de los paisajes, la ilustración tiene una gran fuerza por expresar vivencias, sentimientos, frustraciones... Hay reporteros que dibujan sus viajes, y otros que colaboran con ilustradores para reflejar mejor sus viajes y ampliar el público de sus crónicas. Ahora se publica una antología de crónicas viajeras dibujadas: Viajes dibujados, que lleva como subtítulo 14 historias ilustradas de viajes sin ficción. Se trata de una aventura editorial emprendida conjuntamente por Altaïr Magazine, referente de las revistas de viajes de aquí, y Norma Editorial, la mayor editora de cómic catalana...

Azul intenso y apuntes de México. Peter Kuper.

Viajes rutinarios

Además de una introducción y de una conclusión donde se plantea la relación entre ilustración y viaje, y de una reflexión sobre el viaje hacia ninguna parte sitio de Amanda Mijangos, Dibujos animados nos lleva por viajes muy diversos. Hay alguno, como el viaje a Florencia de Sarah Glidden, en que se plantea como hacer el turista cuándo no se quiere hacer el turista. O Azul intenso y apuntes de México, de Peter Kuper, que narra un viaje bastante standard de un ciudadano de Estados Unidos en el país vecino del Sur, o incluso La lengua de Berlín, de la libanesa Zeina Abirached, en que habla de su conflictiva relación con la lengua alemana. En Paisajes, de Tyto Alba y Gabi Martínez, el primero traspasa a dibujos el viaje que hizo el segundo por Australia en busca de un mala, un pequeño marsupial en peligro de extinción. Aude Picault nos lleva hasta la Patagonia, pero en cambio Pere Joan y Agustín Fernández Mallo explican la historia de una pequeña escalada, en el Central Park de Nueva York...

Un paréntesis patagónico. Aude Picault.

En los confines del mundo

Pero también hay viajes a destinos poco frecuentes. Un viaje por el interior de Beiruth en transporte público con el que Barrack Rima y Christophe Dabitch explican la división social libanesa. Una incursión en el campo de refugiados de Domiz, en el Kurdistán iraquí, de Olivier Kugler, en que nos retrata las vivencias de algunos de los internados en este lugar. Carla Berrocal adapta una crónica de un viaje de Martha Gellhorn a Rusia en pleno periodo soviético. Mario Trigo ilustra una crónica de Xavier Aldekoa sobre udán, en el que se explica la historia de unas mujeres que huyen de la guerra. Y Susanna Martín, en Siempre con vos, hace un reportaje de máxima actualidad sobre la revuelta civil nicaragüense contra el gobierno de Daniel Ortega. E incluso hay un apartado que no se refiere propiamente a un viaje, sino la historia de un motín vivido por el dibujante Ramón Esono, encarcelado por el gobierno de Obiang Nguema por sus ilustraciones, en la prisión de Black Beach de Malabo, en Guinea Ecuatorial.

Domiz. Olivier Kugler.

Estilos diferentes

Todos los capítulos de esta revista-libro tienen en común establecer una relación entre la crónica de viajes y la ilustración. Pero la relación entre ambas es muy distinta en cada apartado. En algunos casos, como el de Sussana Martín, la imagen ocupa una posición bastante clásica, como un simple complemento del texto (o incluso como sencillos croquis de recordatorio de una vivencia). En otros hay un profundo trabajo de guion para convertir un texto inicialmente pensado para no llevar ilustraciones en un relato en formato cómic (cómo es el caso de Mario Trigo y Xavier Aldekoa). En otros, el texto es un simple acompañamiento, que contextualiza los dibujos del artista, que son lo más relevante, como en el caso de Aude Picault. Y hay casos en que la historia se ha montado como cómic, directamente, como en la colaboración entre Pere Ortín y Ramón Esono... El libro demuestra, sin duda, la capacidad que tiene la ilustración para maridarse y complementar a la escritura en un relato de viajes. Ahora bien, los resultados son desiguales: no hay siempre una exitosa combinación de formatos.

Dimbo Dimbo. Ramón Esono y Pere Ortín.

Un viaje que va más lejos

Con este número especial, Altaïr Magazine asume un gran reto, pues escapa al formato habitual y hace una edición con tapa dura, de lujo, que quizá no plazca a los lectores habituales pero que puede atraer nuevos públicos. Sin duda, con esta publicación se nos abre la puerta a otra forma de ver en el mundo, que en ciertos aspectos tiene ventajas claras con respecto al documental, la crónica periodística o el libro de viajes. Viajes dibujados es una apuesta por un formato de futuro, que sin duda cada vez formará más parte de la cultura viajera de los ciudadanos. El mundo del viaje sin duda acabará inmerso, en cierta medida, en el mundo del cómic. Ahora hay que ver cómo...

 

Foto de portada: Paisajes de Tyto Alba y Gabi Martínez.