Descorbatado, con ademán distendido y casi con voluntad de fundirse con el resto del público. Así es como se pudo ver el viernes por la tarde al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, durante su visita al Primavera Sound, dónde fue recibido por el director del festival, Alberto Guijarro.
De hecho, Puigdemont, que no olvida su pasado musical, llegó a pasar desapercibido en algunas de las imágenes tomadas durante la visita, donde se funde con la multitud de asistentes, la mayoría de ellos de procedencia extranjera y, con toda probabilidad, ajenos a la visita del muy honorable.
En todo caso, el mismo presidente dio fe de su visita por medio de un tuit, donde definía el festival como "un referente mundial de la música".