El filósofo Walter Benjamin murió en septiembre de 1940 en la habitación de un hotel de Portbou, cuando intentaba huir de la persecución nazi. Se suicidó, porque la policía franquista lo advirtió que sería entregado a las autoridades francesas, que probablemente lo transferirían a la Gestapo (aunque hay versiones que afirman que fue asesinado por agentes estalinistas). Sea como sea, su pensamiento está bien vivo, y cada año se celebra, en Girona y la Jonquera, un coloquio internacional para honrarlo y para reivindicar la vigencia de su obra. Este año este congresos benjaminino, que tendrá lugar del jueves 4 al sábado 10 en la Facultad de Pedagogía de la Universitat de Girona, está dedicado a la memoria. Se titula: "Vías de recuerdo y reparación en la sobremodernidad: memoria, postmemoria e historia crítica" y es coordinado por el Museu Memorial de l'Exili y por la Cátedra Walter Benjamin de la Universitat de Girona.

Más Benjamin que nunca

Maximiliano Fuentes, coorganizador de este coloquio, afirma que Benjamin tiene "una vigencia enorme", porque dio lugar a un pensamiento peculiar, combinación de un marxismo heterodoxo y una visión mesiánica del poder, que abarcó muchos campos, la memoria, la historia, las artes... y en el campo de la historia se interesó, sobre todo, en pensarla desde el punto de vista de los vencidos, lo que llamaba "mirar la historia a contrapelo". Es por eso que se ha decidido aprovechar su pensamiento por un tema que está de plena actualidad, el de la memoria (por ejemplo, con el caso del Valle de los Caídos). Maximiliano Fuentes considera que "la visión de Benjamin es fundamental en políticas de memoria, para ver cómo pensamos el franquismo, el holocausto, las dictaduras americanas...".

Pasajes, de Dani Karavan. Memorial a Walter Benjamin en Portbou. Foto: Nostrix.

La postmemoria

La edición de este año del Coloquio está dedicada a "Vías de recuerdo y reparación en la sobremodernidad: memoria, postmemoria e historia crítica". Fuentes explica que hace 10 años apareció el concepto de postmemoria, para referirse a la transmisión de la memoria entre generaciones, al hecho de que los descendientes del holocausto o del franquismo se sigan considerando víctimas, lo que produce "usos y abusos de la memoria, un peligro muy presente". "Eso es una paradoja", comenta Fuentes, "la sobremodernidad tiene la memoria omnipresente, pero en cambio piensa en un presente permanente, sin vinculación directa con la historia...".

Tumba de Walter Benjamin en Portbou. Foto: Norro.

Debate entre historia y memoria

Fuentes apunta que uno de los grandes problemas, en este tema, es la relación entre historia y memoria: "Una cosa es la memoria, unos recuerdos que son parciales, y en cambio la historia tiene el objetivo de crear una realidad lo más completa y lo más compleja posible". Como esta relación es a menudo conflictiva, la mesa redonda final del Coloquio debatirá sobre las políticas públicas de memoria a través de casos prácticos. Participarán en ella Montserrat Duch, para hablar del caso del franquismo y la guerra civil, Laure Neumayer, para reflexionar sobre el naxisme y el estalinismo, y Emilio Crenzel para debatir sobre el caso del Cono Sur. El sábado 30 el Coloquio organiza una caminata de Banyuls a Portbou, en homenaje a Walter Benjamin.