Las dos pasiones de Woody Allen no podrían encontrar una mejor esquina para cruzarse que en nuestra Barcelona. El cineasta americano será el encargado de inaugurar el 55.º Voll Damm Festival de Jazz, con dos conciertos en el Teatro Tívoli que interpretará con su New Orleand Jazz Band, y justamente en paralelo a la presentación de su nueva película, Golpe de suerte —Coup de Chance, en francés—, que ha presentado en el Mooby Aribau Cinema y que podría no ser la última del director. En declaraciones al programa El Món a Rac1, Allen ha dicho que estaría abierto a hacer otro filme si alguien quisiera financiarla. "Si alguien quiere hacer una pelicula, y se macosta y vuelo finançarla, yo normalmente caigo en la tentación muy fácilmente; lo que no haré se buscar yo financiación, pero si alguien me ofrece financiación, estaría encantado de hacer otra película".
Golpe de suerte es la 50.ª película de Woody Allen, que ha confesado que "solo puedo hacer películas en lugares donde me gusta vivir". Esta última producción se suma a otros filmes destacados como Manhattan, Annie Hall, Scoop, Medianoche en París o Día de lluvia en Nueva York. y, según ha narrado, es un filme sobre la suerte y la precariedad de la existencia. Pero una de las películas más recordadas en nuestra casa es, sin duda, Vicky Cristina Barcelona, rodada en la capital catalana y protagonizada por Penélope Cruz, Javier Bardem y Scarlett Johansson, y de la cual el cineasta tiene un muy buen recuerdo.
"Me encantó vivir en Barcelona durante unos cuantos meses, fue una maravilla y mi familia también disfrutó mucho de esta ciudad; trabajé con actores maravillosos y disfruté de la gastronomía maravillosa cada noche: fue simplemente divertidísimo", ha explicado durante la entrevista. "Me encanta Barcelona, es una de las mejores ciudades del mundo; me sentí súper feliz de vivir en Barcelona y sin duda volveré siempre que me quieran". Allen, de 87 años y que también ha declarado ser un hombre urbanita y "absolutamente de ciudad", es un apasionado del séptimo arte pero tiene las cosas claras. Igual que ha negado que tenga un guion para una hipotética próxima producción, también ha confirmado en El Món a Rac 1 que tiene muchas ideas, pero que nunca se pone a escribir hasta que tiene la seguridad por bandera. "Tengo ideas para hacer una nueva película, pero nunca escribo el guion hasta que el dinero está en la bolsa".
Un hobbie más allá del cine
No es la primera vez que Woody Allen hace jazz en la ciudad de Barcelona. En esta ocasión, inaugurará la nueva edición del Festival de Jazz de Barcelona, con dos conciertos en el Teatro Tívoli que casi han agotado sus entradas. "Para mí es una ciudad afortunada, y la verdad es que me ilusiona muchísimo tocar jazz", ha dicho en el matinal de Rac1. Sin embargo, no ha dudado al reconocer que no hay punto de comparación entre la música y hacer películas, su profesión y a las que ha dedicado toda su vida. Woddy Allen también ha explicado que no suele utilizar el jazz que le gusta en sus películas, porque considera que "tiene que ser una una música de trasfondo y no quiero que coja protagonismo". Por eso, en sus filmes utiliza un jazz más tranquilo que solo dé apoyo a la imagen, pero que en ningún caso tenga un efecto principal dentro de la trama.