Entre Xavi Hernández y Joan Laporta están ayudando a reflotar un barco que cada vez estaba más hundido. El nuevo presidente el Barça heredó una plantilla hipotecada por culpa de unos contratos millonarios. Con respecto al técnico de Terrassa, empuñó el timón de un barco que navegaba a la deriva de la clasificación lejos del transatlántico del Real Madrid. Concretamente, era noveno en la clasificación y se encontraba a cinco puntos de posiciones Champions. Como en aquel momento, quien marca las posiciones de acceso a la máxima competición europea también es el Atlético de Madrid, pero ahora el Barça está a tan solo un punto de distancia.

Aparte del ámbito deportivo, Laporta también ha conseguido destensar en un grado considerable la masa salarial de la primera plantilla blaugrana. Ha conseguido domiciliar a Philippe Coutniho en el Aston Villa, renovar a la baja a Samuel Umtiti e incorporar jugadores del gusto del entrenador como Ferran Torres o Dani Alves. Con todo, siguen habiendo algunos casos latentes. Según las informaciones que anunció Lluís Canut en el programa 'Once' de Esport3, los capitanes Gerard Piqué, Sergio Busquets y Jordi Alba eran los futbolistas mejor remunerados de la plantilla con 28, 23 y 20 millones de euros brutos anuales respectivamente.

Gerard Piqué, saludando en la gradería / EFE

Sergi Roberto, también en el punto de mira

A pesar del episodio que protagonizaba Gerard Piqué vía Twitter publicando el 50% de su sueldo con el fin de desmentir tal información, la clasificación salarial de Lluís Camut situaba a Sergi Roberto en los 12 millones de euros anuales, la misma cifra que percibe Ousmane Dembélé. El de Reus, apartado de los terrenos de juego desde el pasado 22 de noviembre, es uno de los medios a través de los cuales Joan Laporta quiere seguir haciendo hueco  con respecto a la masa salarial.

Tiene contrato en vigencia hasta el 30 de junio de la presente temporada y Xavi Hernández quiere seguir contando con él de cara al futuro. Lo considera un buen comodín. Polivalente y futbolista de la casa. Un perfil que interesa de cara a la reconstrucción de la plantilla. Con todo, el Barça lo renovará siempre que acepte rebajarse el sueldo. Las grandes inversiones están reservadas para futuras operaciones de jugadores imprescindibles para el futuro y, al fin y al cabo, Sergi Roberto no lo es.

Sergi Roberto y Joan Laporta, hablante / FC Barcelona

Su renovación sigue en standby

La junta directiva clasifica la prolongación de su contrato por debajo de casos como el de Gavi, Ousmane Dembélé o Ronald Araujo. Con el canterano andaluz no hay prisa. Su renovación es prácticamente segura y se acabará por llevar a cabo más tarde o más temprano. Con respecto al extremo francés, ha pedido un cara a cara con Joan Laporta con el fin de llegar a una conclusión y resolver su futuro, mientras que con Araujo, se sabe que sus intenciones son seguir en el Camp Nou a pesar de haber recibido ofertas superiores desde Inglaterra.

No habrá decisión final hasta una vez resueltos los tres casos más urgentes. Si el mediocampista de 29 años no acepta rebajarse el sueldo, cabe la posibilidad de que el Barça le deje marcharse con la carta de libertad bajo el brazo. El objetivo principal será incorporar a Erling Haaland. Todo lo demás, está de más.