El FC Barcelona sigue moviéndose con rapidez en el mercado de fichajes, decidido a reforzar la plantilla de Hansi Flick con un extremo izquierdo de calidad. La prioridad absoluta del club es dar con el jugador que pueda aportar el desequilibrio necesario en la banda, y uno de los nombres que más suena últimamente en las oficinas del Camp Nou es el de Federico Chiesa.
El internacional italiano, actualmente apartado de la Juventus, podría convertirse en la nueva estrella azulgrana por una cifra cercana a los 15 millones de euros. Deco está en plena negociación para cerrar este movimiento que sería clave para el equipo.
La posibilidad de incorporar a Chiesa se ha convertido en una opción real para el Barça en los últimos días. Todo comenzó cuando la Juventus, de la mano de su nuevo entrenador Thiago Motta, decidió poner al talentoso extremo en la lista de transferibles. Esta decisión sorprendió a muchos, ya que Chiesa había sido una de las figuras destacadas del equipo turinés, pero la Juve está decidida a aligerar su masa salarial, y Chiesa, con sus 6 millones de euros netos anuales, es uno de los principales candidatos a salir.
Desde el entorno del jugador, la idea de recalar en el Barça es vista con muy buenos ojos. Chiesa está dispuesto a poner de su parte para que la operación llegue a buen puerto. A pesar de las ofertas que ha recibido de grandes equipos de la Premier League, como el Manchester United y el Chelsea, el internacional italiano prefiere probar suerte en LaLiga, y el Barça es su destino soñado. La operación podría cerrarse por unos 15 millones de euros, una cifra que, dadas las circunstancias del mercado, se considera una auténtica ganga para un jugador de su calibre.
El Barça, por su parte, ya ha recabado todos los informes médicos necesarios y tiene la certeza de que Chiesa está en perfectas condiciones físicas. A pesar de haber superado una lesión grave de rodilla hace dos años, el italiano ha demostrado su capacidad de recuperación, mostrando un buen nivel durante la última Eurocopa y manteniéndose en plena forma física.
Aunque la prioridad inicial del Barça era otro nombre, como el de Nico Williams, las dificultades económicas han hecho imposible esta operación. El club blaugrana también exploró opciones como la de Luis Díaz, pero el Liverpool se mostró inflexible en sus negociaciones, declarando al colombiano intransferible. Kingsley Coman, otra de las alternativas que gustaba a Hansi Flick, también resultó complicado debido a su elevado salario y la competencia de otros equipos.
Con el cierre del mercado cada vez más cerca, los próximos días serán decisivos. Si Deco consigue cerrar la operación, Hansi Flick tendrá a su disposición una nueva estrella que promete devolver al Barça el brillo necesario en la banda izquierda.