A diferencia de lo que ocurrió en veranos anteriores, cuando el nombre de Harry Kane estaba también encima de la mesa de Florentino Pérez pero el presidente del conjunto blanco no quería saber nada del delantero inglés, ahora la situación es muy distinta. Entre otras cosas porque Karim Benzema ha decidido poner punto y final a su historia en el Santiago Bernabéu y, por lo tanto, el Real Madrid necesita sí o sí hacerse con un delantero de primer nivel que pueda cubrir el hueco de la estrella francesa.
Si bien es cierto que en la dirección deportiva del conjunto blanco así como en el cuerpo técnico son muy conscientes de que Kane no es precisamente un delantero joven sino más bien un jugador ya muy maduro al que le quedan tres o cuatro años en la élite por delante, ven con buenos ojos hacerse precisamente con un jugador que no necesite mucho proceso de adaptación, sino que llegue y que tenga un rendimiento inmediato, al más puro estilo Robert Lewandowski en el Barça de Xavi Hernández.
Eso sí, tanto Florentino Pérez como Carlo Ancelotti saben muy bien que, por mucho que ahora el Tottenham sí que está abierto a negociar la salida de su jugador estrella, desde Londres tampoco para facilitar la marcha de Kane.
Las dos ‘víctimas’ para fichar a Kane
Cuentan en la prensa inglesa que la idea de Daniel Levy, el máximo responsable del club inglés, es que Florentino Pérez y su Real Madrid acaben pagando una cifra cercana a los 100 millones de euros, una cifra que evidentemente el club blanco no quiere pagar y menos por un jugador que está apunto de cumplir 30 años.
Es por eso que la intención de la entidad madridista no es otra que la de rebajar el precio el fichaje de Harry incluyendo uno o varios jugadores. Y conscientes de que no va a ser fácil contentar a Tottenham, en el Madrid quiere matar dos pájaros de un tiro con esta operación, sacándose encima a Ferland Mendy, un jugador que no ha acabado de triunfar en el Madrid pero que sí que gustar a los de Londres.
Por otro lado, y a diferencia de lo que ocurre con el lateral francés, al que tanto Florentino como Ancelotti no echarían mucho de menos, también hay quien está intentando poner encima de la mesa de esta negociación a Rodrygo, un jugador que no tiene ningún tipo de intención de marcharse del Santiago Bernabéu y que en el club blanco ven como un jugador clave del presente y del futuro.
Falta saber ahora hasta qué punto tanto Florentino como Ancelotti estarán dispuestos a deshacerse de algunas de sus estrellas para acabar fichando a un Kane que, tras la salida de Benzema, tiene pie y medio en el Madrid.