Florentino Pérez rechazó hasta en dos ocasiones el fichaje de N’Golo Kanté cuando estuvo sobre la mesa. La primera fue cuando Zinedine Zidane todavía dirigía al Real Madrid, y solicitó su incorporación para tener a un competidor que pudiera ponerle las cosas complicadas a Casemiro. Pero el presidente consideró que no era necesario, y además su coste era demasiado elevado. Y la segunda vez fue hace tan solo unas pocas semanas.
Aprovechando que su contrato expira en junio, el crack del Chelsea se había ofrecido al Santiago Bernabéu, pero se encontró un ‘no’ por respuesta. No están interesados en él, ya que están al día de sus constantes problemas con las lesiones, y además ya tiene una edad avanzada. Por si eso no fuera suficiente, están encantados con el rendimiento que viene ofreciendo Aurelien Tchouameni, y buscan a otro perfil de centrocampista, como Jude Bellingham o Enzo Fernández.
En cambio, el Barça sí que parece estar muy seducido por la idea de llevarse a un futbolista de su nivel y de su experiencia. Creen que sería un refuerzo más que interesante, sobre todo considerando que Sergio Busquets se marchará a final de curso, y es uno de los sustitutos que más gustan. Evidentemente, el hecho de que pueda llegar totalmente gratis juega muy a su favor, y las conversaciones están realmente avanzadas.
Joan Laporta parece estar muy convencido con Kanté, y el internacional francés ha hecho saber que le gustaría mucho jugar en el Camp Nou a las órdenes de Xavi Hernández. De hecho, pide cerrar un acuerdo cuanto antes, para así dejar sentenciado su futuro. En Stamford Bridge ya conocen las intenciones del campeón del Mundial de Rusia, que pasan por cambiar de aires, y no hay nada ni nadie que pueda convencerle para que se quede.
A partir del uno de enero, no habría ningún obstáculo ni ningún tipo de impedimento legal para que el ex del Leicester City y del Caen pueda hablar con la entidad azulgrana, y pactar su nuevo documento de trabajo.
Kanté tendrá que aceptar una rebaja de sueldo muy importante
Eso sí, Kanté ya sabe que deberá de hacer un esfuerzo considerable para conseguir aterrizar en el Barça. La situación económica que atraviesan no permite hacer locuras, y además de no poder ofrecerle una prima de fichaje muy elevada, no podrán igualarle el sueldo que percibe en Londres.
Mateu Alemany ya le ha advertido de esto, y el galo parece estar dispuesto a aceptar un sueldo mucho más reducido del que percibe actualmente, pues cobra alrededor de 18 millones de euros netos por campaña.