El Real Madrid ha cambiado el plan de ruta que había diseñado con Jude Bellingham. Ya no es una prioridad para este verano, después de conocerse que el Borussia Dortmund no tiene intención de rebajar los 150 millones de euros que exigen por su libertad este verano, una cifra que Florentino Pérez no está dispuesto a desembolsar por el astro inglés ni por ningún jugador, después de la mala experiencia que tienen con Eden Hazard.

Así que ahora mismo lo más probable es que opten por esperar hasta 2024, momento en el cual podrán cerrar su contratación a cambio de un precio mucho más razonable, aprovechando que solamente le quedarán 12 meses de contrato en el Signal Iduna Park. Y ha activado dos operaciones para compensar la no llegada del ex del Birmingham City, ambas en forma de renovaciones. La primera de todas es la de Toni Kroos, que firmará por otro año más.

Siguen estando muy satisfechos con el rendimiento que ha mostrado el internacional alemán durante la presente campaña, que claramente se ha beneficiado de no disputar el Mundial de Qatar, y haberse retirado de sus compromisos con la selección. Esto le ha permitido tener mucho más descanso, al igual que en el año anterior, y no acumular tanta sobrecarga de minutos. Para Carlo Ancelotti es un fijo, y así lo ha demostrado durante todo el curso.

Cuando ha estado disponible, ha disputado absolutamente todos los partidos como titular, y siempre aparece en los momentos decisivos. Su experiencia es muy valiosa, y es un peso pesado dentro del vestuario. Junto con el campeón del Mundial de Brasil, también se espera que Luka Modric se quede en el Santiago Bernabéu, a pesar de que en algunos momentos de la campaña ha mostrado una irregularidad que no es habitual en él.

Pese a eso, la confianza en el ‘10’ sigue siendo máxima, y creen que está capacitado para seguir jugándolo todo, y no hay necesidad de incorporar a Bellingham todavía.

Modric y Kroos, un premio a la constancia

De forma que Modric y Kroos podrán cumplir su sueño de retirarse con la elástica del Madrid, que es el plan que siempre han tenido. Así lo han afirmado en múltiples ocasiones, cuando han sido preguntados, y pueden despedirse juntos, al finalizar la próxima temporada.

Bellingham, por lo tanto, deberá de seguir esperando y haciendo méritos en el BVB para ganarse su fichaje.