Deco ha cerrado uno de los movimientos más importantes del mercado con el FC Barcelona asegurándose una opción de recompra de Mika Faye, quien recientemente fue traspasado al Rennes por 11 millones de euros. El acuerdo incluye una cláusula que permitiría al Barça recuperar al joven defensa por 30 millones, una cifra que refleja el interés que aún mantiene el club por el jugador, quien fue vendido en parte debido a la necesidad de generar 'fair play' financiero.
Según el agente del futbolista, Andy Bara, el Barça tuvo que tomar esta decisión por la negativa de Iñigo Martínez a abandonar el equipo, lo que forzó la venta de Faye para equilibrar las cuentas. "El Barça quería incluir una cláusula de recompra en el contrato de Faye con el Rennes y esa fue la única condición que pusieron", afirmó Bara. Ahora, todo depende del rendimiento del jugador en su nuevo equipo, y si logra destacar, el Barça no dudará en traerlo de vuelta.
Hansi Flick también tuvo un papel importante en la transición de Faye. Durante la gira de pretemporada en Estados Unidos, Flick le dio confianza al central senegalés, asegurándole que tendría al menos 10 apariciones en el equipo esta temporada, con vistas a evaluar su progreso en la próxima. Este apoyo fue fundamental para que el jugador aceptara la salida, según explicó Andy Bara: "Faye estuvo de acuerdo con Flick y todos estábamos contentos".
Sin embargo, la necesidad del Barça de vender jugadores para cumplir con las exigencias económicas también influyó en el traspaso. La directiva del club catalán tenía en mente reforzarse con jugadores como Dani Olmo, pero las limitaciones financieras forzaron algunos sacrificios. En este sentido, Bara destacó que utilizó a Faye para ayudar al club en este complicado escenario económico.
En cuanto a la adaptación de Mika Faye al Rennes, Bara confía en que será rápida, ya que el jugador, de origen senegalés, habla francés y se ha integrado bien en su nuevo entorno. "Es rápido, fuerte, técnico y zurdo", añadió su agente, quien tiene grandes expectativas para el joven central. Según las conversaciones que ha mantenido con el Rennes, Faye debería ser titular en uno o dos meses, lo que aceleraría su evolución.
Antes de que el traspaso se concretara, varios clubs mostraron interés en el defensa, incluidos equipos como el Inter, el Olympique de Marsella y el Eintracht Frankfurt. Sin embargo, hasta 15 días antes de su marcha, el Barça aún consideraba la posibilidad de que Faye participara en el primer equipo. A pesar de todo, el acuerdo final fue satisfactorio para todas las partes, y desde el club catalán aseguran que siempre tendrá las puertas abiertas si cumple con las expectativas en el Rennes.
Deco ha dejado claro que la recompra está ahí y que el futuro de Mika Faye podría volver a estar ligado al FC Barcelona, siempre y cuando su evolución sea positiva.