A cada año que pasa, quedan pocas dudas de que Florentino Pérez acertó a la hora de rechazar a Neymar Junior. Llegó a estar muy cerca del Real Madrid, especialmente en 2013, cuando hubo un acuerdo verbal, pero que finalmente se rompió para firmar por el Barça. Ese mismo verano, en la capital de España decidieron fichar a Gareth Bale como ‘plan B’, una jugada que no salió nada mal, pues sus primeros cursos en La Liga Santander fueron muy buenos.
De hecho, en su primera campaña en el Santiago Bernabéu fue determinante en la final de la Copa del Rey y de la Champions League, anotando el gol decisivo. Una historia que volvió a repetirse en 2018 contra el Liverpool. Precisamente, ese mismo verano se volvió a hablar de la posibilidad de incorporar al mago brasileño, que solamente llevaba un año en el Paris Saint-Germain, pero ya se había cansado de la débil Ligue1, y quería abandonar Francia.
La venta de Cristiano Ronaldo a la Juventus de Turín le abría las puertas, y el presidente consideró muy seriamente la idea de acogerlo en las filas, si bien a última hora optó por olvidarse de esta posibilidad, y confiar en Vinicius Junior, que acababa de aterrizar. Una apuesta que ha salido a la perfección, ya que el extremo de 23 años no ha dejado de evolucionar desde ese momento, y ahora mismo es considerado como la estrella del equipo, y uno de los mejores futblistas del planeta.
En cambio, ‘Ney’ ha experimentado un declive brutal. En el Parque de los Príncipes esperaba poder ganar el Balón de Oro, o competir por él, pero nunca ha estado cerca de hacerlo. Los escándalos extradeportivos que ha protagonizado han sido incontables, y le han costado ser muy criticado. Además, sus constantes lesiones han hecho que se pierda más de un centenar de partidos desde que Nasser Al-Khelaïfi lo fichó, hace exactamente seis años.
Queda claro, por lo tanto, que Florentino Pérez tuvo un ojo clínico a la hora de cerrarle las puertas del Madrid al ex del Santos.
Neymar, un gasto de más de 450 millones de euros
Neymar hubiese significado un gasto para el Madrid superior a los 450 millones de euros, si contamos el coste del traspaso, siendo el fichaje más caro de la historia todavía, el elevado sueldo que percibe, de 40 ‘kilos’ netos, además de las primas y comisiones para su padre.
Con ese dinero, Florentino Pérez confeccionó una plantilla que es considerada de las mejores del planeta, con nombres propios como Eder Militao, Rodrygo Goes, Thibaut Courtois…