El FC Barcelona, de la mano de Deco, sigue explorando opciones en el mercado para reforzar su plantilla de cara a la próxima temporada. Uno de los nombres que más ha llamado la atención de la dirección deportiva azulgrana es el de Álvaro Carreras, lateral izquierdo del Benfica, cuya progresión no ha pasado desapercibida en Europa. Sin embargo, el club portugués ha tasado al jugador en 50 millones de euros, una cifra que supone un gran obstáculo para el Barça, que busca alternativas más asequibles para competir con Alejandro Balde en esa demarcación.

El interés del Barça por Carreras se ha intensificado tras su espectacular actuación ante el propio conjunto azulgrana en la pasada jornada de la Champions League, donde dejó una asistencia clave y demostró ser un futbolista con gran proyección ofensiva y solidez defensiva. A sus 22 años, el lateral español ha llamado la atención de otros gigantes europeos, incluido el Real Madrid, que sigue buscando un relevo para Alphonso Davies, quien finalmente ha renovado con el Bayern de Múnich, dejando al club blanco sin su primera opción para reforzar el carril izquierdo.

Álvaro Carreras
Álvaro Carreras

El caso de Álvaro Carreras es particular. Formado en la cantera del Real Madrid, dejó el club blanco a los 17 años para unirse al Manchester United, donde no encontró las oportunidades necesarias para consolidarse en la élite. Tras una cesión exitosa al Granada, fue traspasado definitivamente al Benfica, donde ha explotado su potencial hasta convertirse en una pieza clave del equipo lisboeta. A pesar de su vinculación con el club portugués, el Manchester United mantiene una opción de recompra hasta final de temporada, aunque sin derecho de tanteo, lo que significa que la última palabra la tendrá siempre el jugador.

En el Barça, Deco está convencido de que Carreras podría aportar mucho al equipo de Hansi Flick, ya que su perfil encajaría perfectamente en el sistema del técnico alemán. Su capacidad para incorporarse al ataque, su disciplina táctica y su experiencia en competiciones europeas lo convierten en un objetivo prioritario. Sin embargo, la elevada cláusula de rescisión de 50 millones de euros hace que la operación sea muy complicada, dado el delicado estado financiero del club azulgrana.

El Barça intentará negociar con el Benfica para rebajar el precio del traspaso o, en su defecto, incluir jugadores en la operación para abaratar costes.

Mientras tanto, otros clubes como el West Ham y el AC Milan también han mostrado interés en Carreras, lo que podría complicar aún más la situación para el Barça. La decisión final dependerá del propio jugador, que ha dejado claro en varias entrevistas su admiración por el estilo de juego del conjunto culé y su deseo de jugar en LaLiga en el futuro.