Si el deporte femenino se ha popularizado tanto en los últimos años es, entre otras cosas, gracias al surgimiento de referentes femeninos en el mundo del deporte profesional. Tiempo atrás, era impensable que un partido de fútbol femenino llenara el Camp Nou.
Ahora bien, no solo las deportistas profesionales han contribuido a hacer posible este cambio. También es cosa de las mujeres que, a pesar de no ganarse la vida con ello, han roto barreras de género para practicar el deporte que les gusta. Estamos hablando, pues, de mujeres que también han abierto camino desde el mundo del deporte amateur, ya sea desde la entidad deportiva de su pueblo o de su ciudad. Estas mujeres, sin embargo, a menudo quedan en la sombra a pesar de tener una historia de superación de lo más inspiradora. Es por eso que a continuación te explicamos 6 historias de superación de mujeres deportistas amateurs que han participado en el programa 'Dones i Esport' de la Diputació de Barcelona.
6 historias de superación de mujeres deportistas anónimas
1. Mari Carmen Carbó
Mari Carmen Carbó hace 12 años que participa en el programa 'Vine a fer Esport Salut' que organiza el Ajuntament de Cornellà de Llobregat en las plazas y parques de la ciudad. Se trata de actividades gratuitas, sin inscripción y dinamizadas como por ejemplo running femenino, taichí, iniciación a la natación o marcha nórdica.
Después de toda una vida como maestra, fue con la jubilación que Carbó se interesó por el deporte. Inicialmente, eran muy pocas personas, pero se hizo un muy buen trabajo de difusión (donde ella colaboró activamente) y poco a poco consiguieron ser las casi 625 personas que hoy día participan.
Precisamente por esta contribución a la promoción del deporte entre las mujeres, el Ajuntament de Cornellà otorgó en 2017 a la Mari Carmen el premio Dona i Esport. En la gala de entrega del premio, al lado de muchos deportistas de más renombre, ella se preguntaba: "¿qué hago yo aquí?". Muchas mujeres se me acercaron y me dijeron: "tú eres el único modelo que realmente podemos imitar", señala.
La Mari Carmen también explica que muchas mujeres mayores encuentran que han pasado la vida ligadas a las tareas domésticas y al cuidado de los hijos. Es por eso que, para ellas, el deporte representa una manera de salir de casa, de tener espacios propios y de conocer gente nueva. Es decir, para ellas el deporte es una vía de liberación.

2. Judit Sánchez.
Cada vez más mujeres aprenden defensa personal como una forma de hacer deporte. Una de ellas es Judit Sánchez, vecina de l'Ametlla del Vallès, que el año 2021 se apuntó a un curso de defensa personal impulsado por el ayuntamiento vallesano.
Judith nunca había sido muy deportista, pero llegó un momento de su vida en que la tensión acumulada de la familia (es médico) y el trabajo le pasó factura. Afortunadamente, sin embargo, encontró el curso, cosa que le cambió la vida.
Según explica, la práctica de las artes marciales le aporta seguridad y empoderamiento, pero sobre todo representa un momento de desconexión y de liberación de la tensión de la semana. "Las mujeres tenemos que hacer deporte para nosotras mismas, para que sea nuestro momento", concluye.

3. Ramona Sanz
Tiempo atrás, Ramona Sanz fue operada de cáncer de mama con extirpación de pecho y ganglios. Esta operación provoca linfedema: acumulación de líquido en el brazo por falta de drenaje. Por culpa de esta acumulación, el brazo se hincha y duele. Pero hay maneras de reducir los efectos del linfedema. Una de ellas es la práctica del tiro con arco por la contracción y relajación de los músculos que implica.
Pues bien, el Club de Tir amb Arc de Les Franqueses, sabedor de los efectos positivos para la salud de su deporte, impulsa el programa 'Fletxes per a l’esperança'. Y Ramona, que es una de las participantes, no puede estar más satisfecha.
Para ella, lo más duro no fue el tratamiento oncológico, sino la recuperación. Después de la operación, explica, se sintió como si no valiera nada, como si no pudiera hacer nada. En esta situación, practicar tiro con arco la ayudó a salir del pozo en qué se encontraba. Y es que no solo le ayudó física, sino también mentalmente. De golpe, se volvió a sentir útil, empoderada, y además rodeada de un grupo de personas que califica de "maravillosas". Ahora, Ramona dice que no parará hasta competir.

4. Elisabet Navarlaz
Elisabet tiene 38 años y dos hijas. Ella siempre había jugado a fútbol y, desde hace un año, es jugadora y ayudante de entrenadora del primer equipo federado de chicas gitanas de España, el Club Fútbol Tramontana de la Mina. Es un refugio en medio de un entorno difícil.
Elisabet dice que se ha hecho camino, pero todavía no es fácil que las chicas gitanas jueguen a fútbol, porque tienen que vencer muchos prejuicios. No obstante, la visibilidad que ha conseguido el equipo les ha ayudado a superar barreras, pero todavía hay camino a recorrer.

5. Luisa Huidobro
Con 14 meses, justo cuando empezaba a andar, Luisa sufrió poliomielitis, y desde entonces depende de una silla de ruedas. Eso, sin embargo, nunca le ha impedido practicar a deporte, ya que jugó a baloncesto en silla de ruedas durante toda la juventud. De hecho, fue el hecho de estar embarazada, y no la silla, lo que le impidió participar en los Juegos Paralímpicos de Barcelona 92.
Ya con dos hijos, Luisa entró en contacto con la disciplina que ahora practica, el baile deportivo. Junto con su marido, ha ganado varias veces el campeonato de Catalunya y de España de la modalidad. Y, recientemente, han conseguido la tercera posición en la competición "Dutch Para Dance", organizada en los Países Bajos.

6. Aida Cortés
El equipo de comadronas de la Corporació de Salut del Maresme i la Selva ha diseñado un programa de actividad física en el agua para las mujeres embarazadas que ya han llegado al último trimestre de gestación. Con esta iniciativa se busca incrementar los partos fisiológicos en detrimento de los instrumentados, así como también mejorar la calidad de vida de las gestantes. Y Aida Cortés es una de las participantes.
Gracias a la ingravidez y la flotabilidad se pueden hacer ejercicios que fuera del agua no se podrían hacer, con menos riesgo de carga de las articulaciones. Y el hecho de estar en el agua regula la hipertermia (la temperatura corporal de las embarazadas es superior a la normal, y con el deporte todavía más).
La actividad empezó con una prueba piloto, pero visto el éxito aumentaron las plazas. Hasta el momento, han pasado por el programa 5 grupos de unas 20 embarazadas cada uno.
La valoración que hace Aida es muy positiva. De hecho, para ella es el mejor momento de la semana. Más allá de pasar un buen rato, Aida destaca que las mejoras no son solo físicas (disminución de lumbalgias y dolores, en general mejora del sueño y el descanso, mejora cardiovascular... ), sino también psicológicas, ya que se trata de un espacio donde puede compartir experiencias y preocupaciones.

Las mujeres hacemos deporte
El programa "Mujeres y Deporte" de la Diputación de Barcelona impulsa programas de actividad física continuada para luchar contra el sedentarismo y conseguir la igualdad efectiva entre mujeres y hombres en el deporte.
Los recursos del programa, al que pueden optar todos los municipios de la demarcación, son económicos, materiales, y también técnicos. Estos consisten en ayuda para la elaboración de dos protocolos obligatorios para los municipios: el plan de igualdad de género en la actividad física y el deporte local, y el protocolo para abordar violencias machistas en equipamientos deportivos municipales.