Este fin de semana el Barça vuelve a la Liga. Después del parón por el Mundial de Qatar, los culés son líderes e intentarán mantener la primera posición hasta final de temporada para volver a ganar una competición que hace tres temporadas que no consiguen. Dejando de lado la eliminación de la Champions League, los blaugrana han hecho un inicio de Liga notable, y es que solo han dejado escapar 4 puntos en catorce jornadas.
Si el Barça es líder, en parte, es gracias a los goles de Robert Lewandowski. El polaco es el máximo goleador del torneo, con 13 dianas, en su primer curso en España. Detrás, Marc-André Ter Stegen también ha estado a un nivel espléndido, pero los focos están puestos en la delantera, ya que nadie puede ayudar ni complementar los números de Lewandowski. Es decir, los extremos blaugrana no han rendido al nivel esperado, especialmente dos por los que el Barça hizo una fuerte inversión.
Ferran Torres, en el punto de mira
Uno de los futbolistas más cuestionados desde su llegaba al Camp Nou es Ferran Torres. Llegó como opción de urgencia para el ataque blaugrana en enero, pero su eficacia de cara a portería ha sido muy pobre. El diario Sport apunta que ni Ferran Torres ni Raphinha han convencido en el primer tramo de temporada y que están obligados a dar un salto con respecto a la regularidad si quieren seguir vistiendo la camiseta blaugrana.
De hecho, Ferran Torres empezó la temporada como suplente, por detrás del brasileño, pero también de un Ousmane Dembélé que es el extremo preferido de Xavi Hernández. El gol en el Santiago Bernabéu y, posteriormente, dos partidos notables le sirvieron para tener más minutos, pero su rendimiento volvió a caer. y ha hecho un Mundial más que discreto con la selección española.
Raphinha también está cuestionado: de más a menos
Según la mencionada fuente, Raphinha tampoco ha causado una gran impresión en el primer tramo de la Liga. y su rendimiento ha ido de más en menos. Empezó la temporada con grandes actuaciones, pero se ha ido apagando, aunque marcó el gol que dio la victoria a los culés en el campo del Osasuna en el último enfrentamiento antes del parón.
La directiva del Barça pagó 65 millones por Ferran Torres y 60 por Raphinha, cifras estratosféricas teniendo en cuenta que todavía no eran jugadores top y que la situación económica del club todavía se encuentra con muchas dificultades para cuadrar cuentas. Lo cierto es que estas próximas semanas son cruciales para el valenciano y para el brasileño, y más con la sanción de Lewandowski, y se jugarán su futuro en el Camp Nou.