El Barça esperaba poder deshacerse de Frenkie de Jong este verano, y eran muy optimistas con sus posibilidades. Porque confiaban en no encontrarse con demasiados problemas a la hora de darle salida, y más, después de escuchar la multitud de clubes que había interesados en sus servicios. Joan Laporta le había colocado un precio inicial de 75 millones de euros, que es más o menos lo mismo que costó en su día, en verano de 2019.
A pesar de que el internacional holandés ha estado muy por debajo de las expectativas en las tres campañas que ha pasado en La Liga Santander, confiaban en que eso no complicara las cosas. Y es que aún sigue siendo realmente joven, tiene 25 años, y ya acumula una experiencia muy valiosa en la élite. Xavi Hernández no quería perderle, pero tardó poco tiempo en asumir que era lo mejor para los intereses del club, que necesita recaudar dinero de forma urgente.
Así que Mateu Alemany se ha reunido con el ‘21’ y con su representante para comunicar a ambos que deben de iniciar la búsqueda de un nuevo empleo. Han hecho saber que estudiarán todas las propuestas que lleguen, y que quieren que la relación que les une se termine después de tres años de duración. Aunque ahora ha surgido un nuevo contratiempo en el Camp Nou, y es que todos los interesados son conscientes de las dificultades económicas que atraviesan.
Y pretenden beneficiarse de eso, llevándose a De Jong por un precio muy inferior al que están pidiendo inicialmente. El principal pretendiente del ex del Willem II es el Manchester United, que ha pensado en él como sustituto de Paul Pogba, quien se marchará como agente libre en unas semanas. Erik Ten Hag estaría encantado de reencontrarse con su antiguo pupilo, al que ya dirigió en el Ajax de Ámsterdam, siendo el técnico que mejor rendimiento le ha sacado.
Los ingleses tienen un presupuesto muy elevado, pero la propuesta que pretenden presentar no alcanzaría ni los 50 ‘kilos’. Y no tienen previsto mejorar las condiciones.
El Paris Saint-Germain, otro admirador
Exactamente lo mismo sucede con el Paris Saint-Germain, otro admirador que tiene De Jong. Nasser Al-Khelaïfi planea asestar un nuevo golpe al Barça, y llevarse a otra de sus estrellas, pero tampoco pagará ninguna locura. Y confía en que las necesidades y la desesperación de Laporta por obtener ingresos le lleven a aceptar la salida del holandés a un precio de chollo.
Los culés tienen dos opciones, o tener paciencia y esperar a que llegue una propuesta mejor, o aceptar la venta de Frenkie, aunque sea mucho más barata de lo deseado.
La idea de que siga en la plantilla de Xavi está casi descartada.