El PSG no piensa hacer ninguna concesión al Real Madrid. Nasser Al Khelaïfi se la tiene jurada a Florentino Pérez, a quien acusa de haber estado mal metiendo con Kylian Mbappé cuando creía que la relación entre ambos clubes eran excelentes, por lo que el París Saint-Germain ha visto como un aliciente más el hecho de competir con el Real Madrid por el mismo jugador, lo que le ha convencido para subir su oferta. Además, en el trasfondo está todo el tema de la Superliga, un proyecto liderado por el Real Madrid, el Barça y la Juventus al que se opone el PSG.
El objetivo de ambos es Franck Kessié, centrocampista marfileño del Milan. El conjunto rossonero se ha hartado de advertir como su futbolista, que acaba contrato el 30 de junio, rechazaba una oferta de renovación tras otra. La última, la definitiva, de 6,5 millones de euros por temporada, tal y como informa Il Corriere dello Sport.
El PSG apalabra el fichaje de Kessié
Mientras Kessié aseguraba en público su intención de seguir en San Siro y juraba amor eterno por el Milan, su agente iba recolectando ofertas, procedentes de Madrid, Barcelona y París. Florentino Pérez, que busca un sustituto de garantías para Casemiro, creía tener al futbolista encarrilado, mientras que el interés del Barça se enfrió con la llegada de Xavi, pues el marfileño no es un perfil demasiado idóneo para el 4-3-3 del nuevo técnico blaugrana.
El PSG, que hace un año ya le arrebató Donnarumma al Milan sin pagar nada por el traspaso, repitió la fórmula poniendo encima de la mesa una oferta irrechazable, 9 millones de euros por temporada, una cantidad que el Real Madrid no piensa igualar y que provoca que Kessié ya esté buscando casa en París.
Kessié, a coste cero
El conjunto francés, que el verano pasado ya vio como el Real Madrid le arrebataba a Camavinga, necesita reforzar su centro del campo, por lo que ya ha decidido que Kessié debe aterrizar como sea al Parque de los Príncipes. Para Al Khelaïfi, además, no deja de ser una manera de vengarse del Real Madrid.
Kessié es un jugador que ha progresado muchísimo los últimos meses, un centrocampista muy completo, capaz de cubrir gran parte del campo con su potencial físico, además de organizar el juego y de recuperar un sinfín de balones. Sus galones quedan claros cuando se ve como es el encargado de ejecutar los penaltis del Milan, una tarea que habitualmente recae en las estrellas.