Ha costado un poco más de lo esperado, pero en el Real Madrid ya están convencidos de que acertaron plenamente cuando decidieron pagar 31 millones de euros por hacerse con los servicios de Eduardo Camavinga, en el verano del 2021, cuando todavía era una promesa del fútbol francés. El centrocampista, recomendado por Zinedine Zidane, no empezó demasiado bien su andadura en el Real Madrid, hasta el punto de que el verano pasado se valoró la posibilidad de que saliera cedido. El jugador, muy joven, no acababa de adaptarse, por lo que se consideró que saliera para ganar experiencia en la élite.

El jugador, sin embargo, se negó a irse del Santiago Bernabéu, convencido de que tarde o temprano acabaría demostrando su calidad. Y lo cierto es que en el primer tramo de la temporada nada cambió. Camavinga siguió siendo suplente para Ancelotti, lo que no evitó que Didier Deschamps lo convocara para el Mundial de Qatar, donde jugó algunos partidos como lateral.

Camavinga, luchando un balón con Koundé en el Barça-Real Madrid / Foto: EFE

Un 2023 espectacular de Camavinga

Todo ha cambiado en este 2023, en el que Eduardo Camavinga ha dado el salto que todos esperaban. Primero, como lateral izquierdo, por los problemas físicos de Alaba y de Mendy. Y después, como pivote, hasta el punto de haberle quitado el puesto a Tchouaméni, jugador por el que el Real Madrid pagó 80 millones de euros este verano. Y Camavinga no ha notado la presión de ser ya titular, y en partidos tan importantes como el Clásico de la Copa del Rey, los dos enfrentamientos contra el Liverpool de la Champions League o la visita del Real Madrid al Barça del pasado domingo.

A pesar de la derrota del Real Madrid, Camavinga fue de los jugadores más destacados, mostrando una calidad excepcional para hacer jugar al equipo, además de estar siempre atento a las tareas defensivas, recuperando balones y marcando la línea de presión.

Carlo Ancelotti, dándole instrucciones a Camavinga / Foto: EFE

Camavinga, renovación prioritaria

En pocas semanas, Camavinga ha pasado de estar en la lista de jugadores transferibles a ser un intocable al que corre prisa renovar. Su nivel no ha tardado en llamar la atención para los grandes clubes de la Premier League, el PSG y el Bayern de Múnich, que se han puesto en contacto con su representante para conocer su situación contractual.

Eduardo Camavinga tiene contrato hasta el 2027, pero Florentino Pérez le quiere premiar con una oferta interesante. El francés pasaría a cobrar más, siempre y cuando acepte un contrato más longevo en el tiempo y una cláusula de rescisión de 1.000 millones de euros, lo que lo blindaría totalmente.