Quedan cuatro partidos de Liga, y la sensación es que se le va a hacer muy larga la temporada al Barça. Después de las múltiples y dolorosas eliminaciones sufridas en todas las competiciones, lo que deja como resultado un año en blanco, Xavi Hernández se enfrenta ahora al reto de dejar al equipo segundo clasificado, después de perder esta posición ante el Girona. Una situación quelo dejaría sin disputar la próxima Supercopa de España, con las consecuencias que esto tendría a nivel económico. 

Todo esto ha propiciado que la continuidad de Xavi vuelva a estar en peligro, una semana después de que se le ratificase en el cargo. Tanto dentro del club como entre la afición, existe la certeza de que el de Terrassa no es el indicado para dirigir al equipo. Pero, más allá de todos los problemas que se le pueden atribuir, hay que ser justos y destacar que le ha faltado la que era una de sus piezas clave: Gavi.

Pedri y Gavi celebrando un gol con el Barça / Foto: FC Barcelona

Gavi, de los pocos que se salva de la quema

El centrocampista andaluz sufrió una rotura en el ligamento cruzado el pasado noviembre, tras el partido de la selección española contra Georgia. Una lesión que le ha hecho perderse toda esta temporada y una parte de la siguiente. Aun así, en el club son conscientes de su calidad e importancia en el equipo, por ello se ha librado de la quema que están preparando. Y es que Joan Laporta, decepcionado con el rendimiento de la plantilla, está dispuesto a vender a quien haga falta para solucionar la situación económica del club y traer a los refuerzos que verdaderamente desea. 

Gavi, junto a Lamine Yamal y Pau Cubarsí, es el único que tiene su continuidad asegurada. Una noticia que el jugador celebrará, ya que por su barcelonismo estará encantado de seguir jugando en el club de sus sueños. Pero que deja una contraparte negativa. Su mejor amigo, Pedri, no se libra de las críticas y podría acabar saliendo traspasado.

Pedri, decepcionado tras sufrir una lesión en el Athletic Club - Barça / Foto: EFE

Pedri, en riesgo de venta

El canario ha sido uno de los protagonistas negativos de esta temporada. Después de varios años acumulando lesiones en los momentos importantes del curso, se esperaba que el centrocampista pudiese dejar atrás esta situación y convertirse en uno de los líderes del equipo. Lejos de esto, apenas ha tenido regularidad en todo el año por culpa de su estado físico.

Una situación que ha obligado algunos a mirar más allá, llevando a especulaciones con su vida nocturna. Independientemente de esta posibilidad, lo cierto es que su rendimiento ha caído en picado, lo que le ha quitado el cartel de intransferible que ostentaba antes. Siendo uno de los jugadores más cotizados de la plantilla, Laporta no vería con malos ojos su salida, siempre que esta ayudase a la economía del club. Un movimiento que, de producirse, podría ser un duro golpe anímico para Gavi.