Ya se sabe cómo acaba la historia de un gallinero con más de un gallo. Se pelean. El vestuario del Paris Saint-Germain es un gallinero en el que hay unos cuantos. Sergio Ramos es un líder, Marquinhos es el capitán, y Neymar, Leo Messi y Kylian Mbappé no van cortos de ego. Tanto Mauricio Pochettino como Nasser Al-Khelaïfi están obligados a lidiar con este factor y conseguir hacer encajar las piezas de un puzzle que empieza a desmontarse.

Todos los quebraderos de cabeza del PSG giran en torno a la situación de Mbappé. El delantero francés es quien tiene con el corazón en un puño al club, ya que su contrato acaba en junio de 2022 y cabe la posibilidad de que abandone París a coste cero. Ante esta alternativa, en las altas esferas del Parque de los Príncipes se trabaja en su renovación y se quiere cerrar el culebrón como antes mejor.

Kylian Mbappé, celebrando un gol / EFE

Las órdenes de Al Thani, escritas en piedra

Cuando Tamim bin Hamad Al Thani, capo máximo del PSG y miembro de la familia real catarí, dictamina una orden, no hay discusión. Están por encima de todo y de cualquiera y se tienen que cumplir. Así ha pasado con el nuevo contrato de Kylian Mbappé. Al Thani ha ordenado a Al-Khelaifi que renueve sea como sea al parisino. De hecho, el gigante francés lo considera el mejor futbolista del mundo y le ha hecho llegar una oferta al jugador que lo coloca como el mejor pagado.

Además, la oferta es más tentadora todavía cuando han prometido que, si facilita su rúbrica, le buscarán salida a Neymar. El caso es que el propio Mbappé y el brasileño no tienen buena relación. La llegada de Leo Messi ha alborotado el gallinero y se ha formado a un clan de poder en turno al argentino que tiene muy molesto a Mbappé. Comandado por Neymar y Messi, los sudamericanos de la plantilla son el nuevo núcleo duro del vestuario y Mbappé ya no es el centro de atención. Si renovara, Neymar iría fuera y Messi sería el siguiente en caer cuál ficha de dominó.

Al Thani, saludando en Qatar / Europa Press

El caso Zidane

Para colmo, el PSG facilitaría todavía más los deseos de Mbappé estableciendo como nuevo entrenador a Zinédine Zidane en lugar del discutido Pochettino. En la jornada del último miércoles, los parisinos sumaron otro empate. Esta vez contra el Lorient, penúltimo clasificado, y ya son tres empates en los últimos cinco partidos.

El periodista de L'Équipe Thibaud Vezirian ha revelado que "Mbappé hace tiempo ya dijo que no quería jugar con Messi". Esté donde esté, quiere ser el centro del proyecto deportivo y el verdadero gallo del gallinero. Si renueva, Neymar y Messi caerán, sería cuestión de tiempo. Si no lo hace, Florentino Pérez lo esperará con los brazos abiertos.

 

Imagen principal: Al-Khelaifi, durante una rueda de prensa / EFE