La salida de Kylian Mbappé ha supuesto un duro golpe para el París Saint-Germain. El proyecto de Nasser Al-Khelaïfi giraba alrededor del delantero francés, por lo que el fichaje de Mbappé por el Real Madrid lo ha trastocado todo. El PSG, que esta temporada ha fracasado por enésima vez en su objetivo de ganar la Champions League, está obligado a salir al mercado, en busca de refuerzos de primer nivel para su línea ofensiva.
Al-Khelaïfi tiene en la lista de objetivos nombres como los de Osimhen y Kvaratskhelia, estrellas del Nápoles, aunque Luis Enrique ha puesto encima de la mesa otro nombre, el de Antoine Griezmann. Y es que el PSG está ante una oportunidad única de poder fichar al delantero del Atlético de Madrid, un ídolo en Francia, que asegura goles y un trabajo incansable sin balón, justo lo que está buscando Luis Enrique para la plantilla parisina.
El PSG quiere fichar a Antoine Griezmann
El hecho es que Antoine Griezmann tiene una cláusula de rescisión de solo 15 millones de euros, una cifra muy baja tratándose de un delantero de la élite. El problema es que Griezmann tiene un sueldo de 10 millones de euros netos, una cifra a la que muy pocos clubes pueden acceder, lo que prácticamente le convierte en intransferible. El PSG, sin embargo, está dispuesto a asumir la ficha, ya que considera que Griezmann sería un valor añadido muy importante para el equipo.
En un primer momento, Griezamnn había decidido colgar las botas en el Atlético de Madrid, después de su mala experiencia en el Barça, aunque le motiva poder entrenar con Luis Enrique, además de que ve que en el PSG tiene más opciones de ganar la Champions League que en el Atlético de Madrid.
Osimhen o Kvaratskhelia, debate en París
Logre fichar o no a Griezmann, el PSG no descarta los fichajes de Osimhen y de Kvaratskhelia, ya que el plan es reforzar la delantera del equipo, para poder competir con el Real Madrid y el Manchester City, los dos gigantes actuales del fútbol europeo. Al-KhelaIfi es consciente de que con el equipo actual tiene poco que hacer, lo que le obliga a poner toda la carne en el asador para mejorar el equipo con nuevas estrellas.
En este sentido, el club es partidario de priorizar el fichaje de Osimhen, un delantero centro puro que asegura goles. Luis Enrique, en cambio, prefiere a Kvaratskhelia, para reforzar los extremos, teniendo en cuenta que al asturiano no le importa jugar sin delantero centro, como ya ha demostrado en otras ocasiones.