El Barça ha goleado al Alavés en un partido en que no había nada en juego para poner punto y final a la Liga Santander. Leo Messi, Luis Suárez, Ansu Fati y Semedo, los goleadores de la tarde, han sacado el orgullo herido del subcampeón (0-5).
El orgullo herido
Y es que a pesar de abrir la jornada porque era el partido más intranscendente del día, que jugara un equipo lleno de suplentes, con Neto como titular y el central del B Ronald Araujo, el equipo ha hecho el último sprint para acabar la Liga con una última sonrisa. Quique Setién ha apostado por un equipo de garantías a pesar de las ausencias y las rotaciones.
Riqui Puig disputando un balón
Se ha notado que la combinación entre la experiencia de los veteranos y las ganas de los jóvenes ha sido clave para encarar la última tarde de sol de la Liga. Y los blaugrana han demostrado el objetivo de la victoria desde el inicio: dos largueros y un palo en sólo 16 minutos.
Y después de los avisos han llegado los goles. Ansu Fati, con asistencia de Messi; Messi, con asistencia de Riqui Puig; y Luis Suárez, con asistencia de Jordi Alba han marcado los tres goles del Barça que han sentenciado el partido antes del descanso. A pesar de no jugarse nada, el Barça ha sacado el orgullo.
Celebración de un gol entre Leo Messi y Ansu Fati
La lucha por el Pichichi
Pero más que mérito del Barça, que no ha hecho un partido extremadamente redondo, ha sido por demérito de un Alavés apático y poco intenso. Y se han encendido las alarmas cuando Lenglet se ha lesionado al inicio de la segunda mitad y Setién ha mirado al banquillo y no ha encontrado a más centrales. De los tres jugadores de campo y los dos porteros que estaban en el banquillo, Semedo ha tenido que salir y Arturo Vidal hacer de central.
Pero este cambio no ha variado la dinámica de un partido que ha tenido tramos de desgana absoluta de los dos conjuntos. El Alavés no ha sabido aprovechar las ocasiones claras de gol, ni Neto ha tenido que salvar al Barça de ninguna acción comprometida.
Luis Suárez rematando ante Roberto
Semedo, cuando todavía no llevaba ni diez minutos sobre el terreno de juego, ha marcado el cuarto gol blaugrana. Una vez más, con asistencia de un reivindicativo Riqui Puig. Y Messi ha hecho su doblete, con regusto de Pichichi, después de acelerar el ritmo del duelo en el minuto 75, cuando el partido estaba más apagado.
Con todo hecho, y con Messi sumando dos goles más para su particular lucha para ser el máximo goleador del Liga, tanto Barça como Alavés han puesto punto y final a la Liga. Los blaugrana, con más pena que gloria, cierran la competición con 82 puntos y como segundos clasificados. Y también podría ser el último partido dirigido por Quique Setién. Veremos al principio de agosto cómo se presenta la fase final de la Champions League.